A un mes del abuso grupal en Palermo: Tratamiento psicológico para la víctima y traslados a cárceles para los abusadores

Agencia Télam

A un mes de la violación grupal en el barrio porteño de Palermo, la víctima no pudo aún volver a trabajar ni a estudiar e inició un tratamiento psicológico para intentar superar el “cuadro postraumático” que le generó el hecho, mientras los seis imputados procesados ya comenzaron a ser trasladados a unidades carcelarias federales para cumplir su prisión preventiva.

El abogado de la víctima, Hugo Figueroa, contó a Télam que a un mes del hecho, la joven abusada de 20 años sigue con asistencia psicológica y médica permanente y que por el momento no pudo retomar su trabajo en una empresa de desarrollo de software, ni sus estudios.

Ella está de licencia en su trabajo. También estudia la carrera de programación que intentará retomar cuando ella y los profesionales de la salud que la asisten consideren que está en condiciones”, dijo Figueroa.

El abogado explicó que “a nivel médico, sigue tratándose con los profesionales del Hospital Rivadavia que la asistieron en un primer momento, mientras que ya está yendo a un psicólogo particular”.

En cuanto a la causa, a cargo del juez en lo Criminal y Correccional 21, Marcos Fernández, y del fiscal 48 del mismo fuero, Eduardo Rosende, comenzaron los traslados de los acusados a cárceles del Servicio Penitenciario Federal (SPF) y se aguardan los resultados de una serie de peritajes que podrían ser clave.

Voceros judiciales indicaron que Ángel Pascual Ramos (23), Lautaro Dante Ciongo Pasotti (24), Franco Jesús Lykan (23), Ignacio Retondo (22) y Thomas Fabián Domínguez (21), esperan cupo para ir al Complejo Penitenciario Federal II de Marcos Paz, mientras que Steven Alexis Cuzzoni (19), por su edad, es el único que ya fue derivado a una unidad de jóvenes adultos ubicada en ese mismo penal.

Los seis serán sometidos también a peritajes psicológicos ya ordenados por el juez, pero además, en los últimos días se les extrajo una nueva muestra de sangre, esta vez para obtener los perfiles genéticos indubitables de cada uno para, de esa manera, poder cotejar sus ADN con los hallados en diversas muestras recolectadas para la causa como evidencia.

También se compararán sus ADN con el de dos muestras de semen halladas dentro del automóvil donde se produjo la violación y con otras 16 recolectadas en las ropas de los propios imputados.