Una joven, de 23 años, denunció que Fernando Salinas, un masajista propietario de un centro de estética en barrio Ayacucho, la “dopó” y abusó sexualmente de ella mientras le practicaba masajes descontracturante el pasado miércoles.
En ese marco, el masajista acusado aceptó hablar en exclusiva con La Super Mañana de Suquía y sostuvo que tiene “4 años en este negocio de barrio Ayacucho. En ese tiempo, han pasado miles de personas que se han atendido, de diferentes sexos y con diferentes tratamientos, y nunca he tenido ninguna complicación ni ninguna denuncia. Inmediatamente después de conocer la acusación me puse en contacto con mi abogado“. “Yo no abusé de ella“, sentenció.
“Ella llegó a las 15:30 por un tratamiento de depilación. Yo le indiqué que ese servicio se realizaba una vez al mes. La depilación la hacen mujeres, yo no lo hago. Yo sólo realizo masajes y algunos tratamientos faciales. Entonces me indica que estaba necesitando masajes porque trabajó en una panadería. Le consulto en qué parte estaba contracturada y me dice que en la espalda, las cervicales y las piernas. Le consulto si quiere que le haga masajes y me dice que sí“, relata Salinas.
“Ella entra al box y le pido que se quite la ropa de la parte de arriba, para poder trabajar con cremas y aceite, y así no se ensucie la remera y las tiras del corpiño. En ese momento, ella me pide tomarse unas fotos y yo le indico que desde su teléfono sí, pero del mío no. Le consulto para que las quiere y me dice que para un Instagram. No me llamó la atención, porque muchas veces las chicas se sacan foto conmigo porque yo atendí muchos famosos en Carlos Paz“, continúa relatando.
“Luego me dice que quiere también masajes en las piernas. Yo le digo que puedo realizárselos por encima del pantalón, pero ella dijo que quería las cremas y aceites. Entonces le digo que voy a salir del box y que me avise cuando se haya sacado el pantalón. Ella aprovechó ese momento para sacar fotos y grabarse. En las imágenes se puede ver que yo en ningún momento me le insinué. Todo el tiempo, mientras le hacía los masajes, le preguntaba si estaba bien o se sentía bien, a lo que ella me respondió que sí, que estaba cómoda y relajada“, indicó.
“Le hice también masajes en las piernas, del lado de adelante. Le dije que no hacía masajes en partes íntimas, pero si le podía hacer con un masajeador en la parte de los ganglios, la pelvis y los ovarios. Ella aceptó. Durante el masaje ella me comentó que a sus amigos les gustaba que ella les hiciera masajes en las partes íntimas, a lo que yo me quedé callado“, relata el acusado.
Consultado sobre cómo se fue la mujer de ahí, asegura: “yo salí del box para que ella se cambiara, luego salió, me agradeció y me preguntó si se podía llevar un folleto para recomendar con sus amigas. También me dejó su celular, pero nunca le escribí ni le mandé ningún mensaje porque no es mi estilo“.
“Para mi, con esta denuncia, me quieren perjudicar a mí a mi estética. Tengo clientes todos los días y jamás le falté el respeto a nadie“, cerró.
La versión de la denunciante
L.C., de 23 años, denunció ante la justicia que Salinas la engañó ofreciéndole una sesión gratis de masajes y la “dopó” utilizando aceites que la adormecieron y la dejaron sin reacción.
Además, la supuesta víctima escrachó al acusado en Facebook y allí fue que otra joven la contactó para contarle que había sufrido una situación muy similar un año atrás. Esta segunda denunciante, que en aquel momento no se había animado a acudir a la Justicia, aportó pruebas que podrían servir para respaldar los testimonios.