Desde hace meses las cárceles de Córdoba se han convertido en un “Call Center” para cometer delitos.
Un recluso que se encuentra alojado en la unidad penitenciaria de Bouwer, hizo una transmisión en vivo vía la red social Facebook.
En el video se lo escucha despidiendo a su hermano que reciamente murió, y jurando venganza por su muerte.
Por detrás también se puede escuchar, en segundo plano, a otro preso que lo acompaña en la celda, está haciendo una estafa telefónica a una mujer de Buenos Aires.