La familia pide retomar la búsqueda activa de la nave y sus tripulantes.
La búsqueda de los dos ciudadanos argentinos que permanecen desaparecidos tras haberse perdido el contacto con el yate en el que viajaban dentro del mar Caribe pudo encontrar una luz de esperanza: un barco divisó luces de bengalas el último lunes sobre las aguas de México y se sospecha si pudieron haber sido lanzadas por la tripulación de la nave perdida.
Así lo confirmó Martín Juárez, hermano de Carlos Juárez, uno de los argentinos desaparecidos y dueño del yate, en declaraciones a los medios mendocinos: “Podrían ser ellos. Coincide con la ubicación”, dijo.
El avistamiento de las luces de bengalas fue en la noche del lunes sobre las aguas del Canal de Yucatán, justo en la entrada al Golfo de México.
El hermano del empresario también advirtió que las autoridades de búsqueda de México detuvieron su operación y que desde las familias se intenta convencerlas para que se reanuden los trabajos más intensos sobre el agua.
“En México han dejado de buscarlos en forma activa, lo que significa que había barcos y aviones que los estaban buscando, pero ahora han cortado ese rastreo por un protocolo que tiene ellos y ha quedado solo búsqueda pasiva”, afirmó Juárez en declaraciones a la agencia Télam.
“Sólo si los barcos que andan por ahí en alta mar los llegan a ver, se vuelve a activar la alarma y lo vuelven a buscar en avión”, agregó.
El hermano del dueño del yate destacó también la importancia de que la nueva búsqueda el canal de Yucatán se realice con la máxima celeridad posible, ya que en dos días es posible que una embarcación a la deriva y sin motor cambie su rumbo y pierda su punto de localización.
Desde la Brigada de Rescate Internacional Cancún informaron que “lamentablemente no tenemos buenas noticias hasta el momento”, y precisaron que desde este miércoles la Marina mexicana “entró en un proceso de búsqueda pasiva donde nos informaron que durante 48 horas monitorearán las corrientes a ver si determinan la presencia o ausencia de restos de la embarcación o cualquier indicio de naufragio”.
Desde esa misma Brigada se le solicita a la Secretaría de Marina de México que pueda reactivar la búsqueda activa, lo que supondría el despliegue de embarcaciones especializadas por la zona y el sobrevuelo de aeronaves en el lugar. Sin embargo, también aclararon que al pasar 48 horas del comienzo de búsqueda formal sin respuesta alguna, en general se suele detener la búsqueda activa y quedar alerta ante el aviso de alguna embarcación que transite por ese punto.
El yate, denominado M.O.I. Guadalupe desapareció el 28 de septiembre cuando viajaba desde Jamaica a la localidad mexicana de Puerto Aventuras, después de haber hecho toda una travesía de ayuda humanitaria en Haití.
En esa embarcación viajaba Carlos Juárez, el dueño de la misma, y otro argentino, el joven Renzo Spasiano, de 20 años. Además, el yate estaba tripulado por un mexicano llamado Martín Vega Argáez, de 44 años, y el cubano Denis Manuel Fernández Díaz, de 46.