Antes de salir al aire comenzó a sentir un malestar físico, pero le contestaron: “No importa, hay que vender”.
Zulma Lobato ganó el juicio que le hizo a Crónica TV, por mostrarla en una momento vulnerable con el solo fin de generar rating. La mediática había sufrido una descompensación y las cámaras del canal grabaron el momento.
El hecho que originó la demanda ocurrió en 2011, cuando asistió a los estudios del canal para realizar una nota en el programa televisivo “Hechos y Protagonistas”, conducido por Anabela Ascar.
Antes de salir al aire comenzó a sentir un malestar físico, pero le contestaron: “No importa, hay que vender”.
Lobato sufrió una descompensación y el canal grabó y transmitió toda la situación, a pesar que el propio médico del SAME pidió que apagaran las cámaras. Tampoco autorizó que la filmaran en esa situación, según explicó en la demanda.
Los jueces advirtieron que la demandante había consentido la realización de una entrevista en ese programa de televisión, pero “ésta tenía por finalidad, únicamente, promocionar su trabajo”.
Sin embargo, la grabación del programa “se vio impedida por el advenimiento de un episodio desafortunado, cuyo registro fílmico en ningún momento fue autorizado; y menos aún lo fue la posibilidad de reproducirlo y/o emitirlo en público”, concluyó el fallo de la Cámara que da la razón a la demanda de Zulma Lobato.
“Me molestó. Hubiera preferido que eso la gente no lo viera. Petinatto hacía un programa, no sé cómo se llamaba y decía: vamos a hacer el Zulmatazo, los que manden una foto con la boca abierta de Zulma Lobato participan de un concurso. Entonces la gente mandaba fotos con la boca abierta. Eso me produjo mucho enojo”, pronunció Lobato.
Además, la mediática dio a conocer que después de ese episodio estuvo internada casi un año porque había perdido el habla y tardó días en recuperarla.