La ministra de Seguridad se refirió a la manifestación que tendrá lugar este martes en varios puntos del país. “Es rara”, definió.
Pocas horas antes de que comience la marcha universitaria federal en defensa de la educación pública, la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, aseguró que implementarán el protocolo antipiquete de ser necesario y criticó a quienes organizan la manifestación: “Siguen generando tensión en un país que necesita cuidarse”.
Tras ello agregó: “Es una marcha compleja, en donde muchos intereses se juntan para querer poner en jaque al Gobierno. Tenemos ciertas precauciones respecto de cuál es el objetivo final”.
“Más allá de los estudiantes y profesores que pueden salir a pedir su presupuesto como tantos otros lo hacen, y sabiendo que el país entero debe ajustarse para poder salir adelante, es una marcha rara”, consideró, en diálogo con los medios.
Asimismo, la funcionaria del gabinete de Javier Milei cuestionó la continuidad de la movilización luego de que el Gobierno le haya otorgado un aumento presupuestario a las universidades. “Tienen un presupuesto importante, y se olvidan de que todos los sectores de la sociedad necesitan un presupuesto menor para salir de la crisis brutal en la que estamos. Hay que comprender el momento histórico, ya lo dijo el Presidente”, afirmó.
“El camino no se tuerce, más allá de los [Sergio] Massa, los [Axel] Kicillof, la CGT (Confederación General del Trabajo) y el elenco estable que se moviliza. Hay miles de estudiantes que entienden lo que el Gobierno está haciendo”, explicó al dirigir una crítica hacia las figuras de la oposición que confirmaron su asistencia a la protesta de este martes. Y sumó: “Me parece una falta total y absoluta de responsabilidad, el país necesita salir de la crisis permanente. Nosotros queremos salir y encontrar un camino, y lo único que hacen es bloquearlo”.
En la misma línea, además de confirmar la aplicación del protocolo antipiquete en caso de que las personas que participen de la movilización impidan la circulación, aseguró que todo dependerá “del tipo de marcha que encuentren en la calle” y que desde el Ministerio de Seguridad se dispuso un plan de trabajo junto a las Fuerzas Federales y la Policía de la Ciudad.
La medida de fuerza será en reclamo por la situación crítica que atraviesan muchas casas de estudio y para pedir que se actualicen los salarios y el presupuesto destinado a la formación académica de miles de estudiantes. Convocada por alumnos, docentes, organizaciones gremiales y sociales, y otros referentes del ámbito académico, cultural, artístico y periodístico bajo el lema “En defensa de la educación pública”, la concentración principal se llevará a cabo a partir de las 15.30 en el Congreso Nacional, desde donde los bloques se trasladarán hacia Plaza de Mayo para terminar cerca de las 18 frente a la Casa Rosada.
Además de la Universidad de Buenos Aires (UBA), se sumarán más de 70 casas de estudio universitarias en todo el país, pertenecientes a las jurisdicciones de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, provincia de Buenos Aires, Entre Ríos, La Rioja, Chubut, Córdoba, Santa Fe, Catamarca, Neuquén, Tucumán, Chaco, San Juan, San Luis, Santiago del Estero, Jujuy, Formosa, Misiones, Río Negro, Salta, La Pampa, Corrientes, Tierra del Fuego y Santa Cruz.
Asimismo, la Federación Nacional de Docentes Universitarios (Conadu), la Asociación Docente de la Ciudad de Buenos Aires (Ademys), la CGT, la CTA Autónoma, y la CTA de los trabajadores definieron que acompañarán el reclamo universitario con un paro de actividades y un llamado a la movilización.