El funcionario dio su versión en exclusiva para Radio Suquía.
La Tesorera de la comuna de Potrero de Garay, Jesica Ceballos, denuncia que el jefe Comunal, Gerardo Martínez, realiza “algunos gastos y erogaciones en su propio beneficio y sin ningún tipo de control por parte del Tribunal de Cuentas”.
Por ejemplo, la denunciante enumera que el municipio compró con dinero público un atado de cigarrillos Malboro Box y más de 60 mil pesos en ropa de una conocida marca.
Además, asegura que la Comuna pagó las viandas de los fiscales partidarios durante las elecciones del pasado 14 de noviembre, por más de 27 mil pesos.
“En síntesis, el Sr. presidente Comunal maneja el dinero en efectivo que ingresa por las cajas comunales a discreción, efectúa pagos sin autorización, otorga becas y programas de prácticas laborales sin hacer la debida convocatoria de aspirantes a dicha ayuda económica”, indicó.
La tesorera asegura que esto se debe a que el funcionario “no deposita en los bancos en los que la Comuna tiene cuenta, el dinero en efectivo que pagan los vecinos en la sede comunal en concepto de tasas. Del sistema, surge que no se rindieron comprobantes de pago por una suma total de $275.673.500,88”.
También denuncia “la existencia de una cuenta en el Banco Santander Rio, Sucursal Alta Gracia, a nombre de la Comuna, que fue manejada durante meses a sola firma por el Sr. presidente Comunal, cuando es obvio que debió ser administrada de forma mancomunada”.
Por otro lado, el escrito de varias páginas indica que “el asesor letrado de la comuna tiene un total de Órdenes de Pago por $2.526.139,00 en lo que va del año, cuando en realidad su contrato mensual es de $24.000”.
La palabra del Presidente Comunal
Radio Suquía se puso en contacto en exclusiva con el presidente Comunal Gerardo Martínez, perteneciente a un partido vecinalista, quien aseguró que se trata de un conflicto de interna partidaria, que el caso cuenta con otros capítulos en los que la denunciada fue Ceballos y que va “a responder ante la Justicia, si así fuese considerado”, y llevará “las pruebas necesarias para demostrar que los dichos no son como han sido contados”.