“Creo que me dispararon dos veces, uno de los tiros me dio en la pierna y el otro rebotó en la pared”, dijo el joven.
“Lo único que pensé cuando vi el arma era correr”, dijo Jeremías, el adolescente de 15 años que fue baleado por dos motochorros que le dispararon a sangre fría para robarle el celular en la localidad bonaerense de Ingeniero Budge la semana pasada. Ya casi recuperado del tiro que sufrió en su pierna, contó que “si los tipos me hubieran dicho ‘dame el celular’ y me mostraban el revólver, yo se los hubiese dado”.
El joven volvía del colegio cuando dos ladrones armados lo interceptaron en el cruce de las calles Saladillo y Ginebra de la mencionada localidad de Lomas de Zamora, y le pidieron el celular. “La verdad que todo pasó muy rápido. Lo único que pensé cuando vi el arma era correr, pero después de escuchar el tiro mucho más no pude hacer”, dijo en diálogo con C5N.
El joven que, al igual que otros casos en donde los ladrones disparan sin previo aviso, a él tampoco le “hablaron ni nada”, sino que “bajaron ya apuntando”. Cuando quiso huir le tiraron: “Creo que me dispararon dos veces, uno de los tiros me dio en la pierna y el otro rebotó en la pared”.
El adolescente que asiste a cuarto año se mostró indignado por el modo en que operan los motochorros: “No entiendo por qué actúan así. Si los tipos me hubieran dicho ‘dame el celular’ y me mostraban el revólver, yo se los hubiese dado. Pero no entiendo que sin decir nada, disparen directamente”. “Lo que me alegra es que hayan agarrado a los chabones y no estén sueltos por ahí”, dijo sobre la detención de Nicolás Eduardo López Vera y Guido Ezequiel Cansino.
El intento de robo y el momento del disparo quedaron registrados en las cámaras de seguridad de la zona, en donde se ve el instante en el que uno de los disparos impactó en la pierna de Jeremías.