Las imágenes que se conocieron son tremendas.
Padres y docentes de todos los niveles educativos de la ciudad cordobesa de Río Segundo denuncian una ola de violencia y robos en las escuelas de la localidad. Las fuertes agresiones físicas y verbales se han vuelto moneda corriente entre los niños de jardín, primario y secundario.
Según indicó la periodista local Georgina Moreno a Radio Suquía, “los especialistas en infancia y educación ponen el foco en la necesidad de priorizar los espacios de escucha y reflexión, pero también destacan la necesidad de enseñar con el ejemplo“.
Los centros educativos secundarios públicos de esa ciudad se han convertido en escenarios de enfrentamientos de alta violencia, tanto en el patio como dentro de las aulas. Las imágenes que se conocieron son tremendas.
Las situaciones difieren en cuanto a sus protagonistas y lugares, pero tienen una factor en común: golpes, insultos, gritos, expresiones de menosprecio y llantos repentinos que irrumpen en medio de la clase. Estos hechos se están convirtiendo en la cotidianeidad que docentes y directivos deben resolver en el interior de los colegios.
La complejidad de las situaciones de maltrato entre los niños del nivel inicial, de hecho, ya ha vuelto a ser un tema que preocupa y se plantea como uno de los desafíos a resolver con las familias.
La denuncia de los padres
Los padres hicieron públicos los videos, pidiendo un cese en las agresiones. Uno de los papás habló con Roberto Battaglino en la Super Mañana de la Suquía y dijo que “cada vez son más los episodios de violencia en la institución. Hemos pedido hablar con la directora, pero no recibimos respuesta. Estamos analizando otras acciones a realizar“.
La palabra de la directora
Tras ese testimonio, la producción de la Super Mañana se puso en contacto con la directora del IPEM 156 – José Manuel Estrada, María Emilia Aichino, quien indicó que “la situación se debe a que los chicos vuelven a encontrarse en las aulas después de dos años de pandemia”.
“La convivencia es una conducta que se aprende y en los últimos años lo hemos trabajado de formas diferentes debido al aislamiento. Lo que se ve en las calles, la poca paciencia y la violencia, se traslada también a las aulas“, sentenció la docente.