Ocurrió en la ciudad de Salta.
En la noche del jueves, durante la final de un Torneo Barrial Sub 17, un jugador se enojó con el árbitro y le pegó una patada en los testículos. Todo ocurrió tras cobrar un infracción en favor del equipo rival. El insólito episodio sucedió en el estadio Padre Ernesto Martearena de la capital salteña.
Tal como muestran las imágenes, luego de marcar un penal durante el complemento, uno de los jugadores con el número 18 empujó al juez. Posteriormente, mientras era expulsado decidió pegarle una patada en los testículos provocando la caída del árbitro que solicitó asistencia.
En medio que se retiraba del campo, sus compañeros le recriminaban la insólita reacción que le traerá duras sanciones. Dicha competición es organizada por el gobierno provincial de Salta. Igualmente, cabe destacar que a los minutos del episodio, el joven jugador ingresó al campo para pedirle disculpas al árbitro y retirarse nuevamente.
Posteriormente, el árbitro en complicidad con el asistente se retractó de la decisión del penal ya que la falta había sido fuera del área. Dicho encuentro terminó siendo victoria por la vía del penal para el equipo del jugador expulsado.