Se trata del condenado a perpetua en Tucumán acusado de los asesinatos de Milagros Avellaneda y su hijo Benicio. Sigue prófugo.
Tucumán no duerme desde que Roberto Carlos Rejas se escapó esta semana del cuartel de Bomberos donde estaba detenido tras haber sido declarado culpable de los asesinatos de Milagros Avellaneda y su hijo Benicio.
La justicia puso una recompensa de dos millones de pesos para quien lo encuentre o aporte datos concretos de su paradero, ya que sigue prófugo y, según periodistas especializados de Tucumán, ya no estaría en esa provincia.
El editor de Policiales de La Gaceta, Gustavo Rodríguez, calcula que incluso ya podría estar en Bolivia y explica que “Rejas piensa y actúa como policía porque es miembro de la fuerza”.