Las llamas dejaron dos muertos y un herido grave.
Más de 370 efectivos del Plan Provincial de Manejo del Fuego y de Protección Civil continuaban hoy trabajando, vía aérea y terrestre, en el combate de los incendios forestales que, desde el pasado viernes, se registran en el norte de la provincia de Córdoba que, según la información oficial, dejó como saldo dos muertos y un herido grave.
El director de Defensa Civil local, Diego Concha, manifestó esta mañana a los medios locales que en la tarde del pasado viernes se generó una tormenta eléctrica en la zona de forestación del departamento Tulumba, Río Seco y Sobremonte, con la caída de tres rayos que luego originó incendios en San José de la Dormida, Caminiaga y en los alrededores de Villa de María.
“La forestación seca y combustible hizo que el fuego, que era muy difícil controlar, se extendiera muy rápido”, manifestó el funcionario provincial.
Desde las primeras horas de esta mañana retomaron las tareas de combate por tierra y por aire con cuatro aviones hidrantes, dos de la provincia y dos del Gobierno nacional, además de un helicóptero que realiza sobrevuelos para tener información sobre el comportamiento del fuego.
Concha sostuvo que en jornada de ayer hubo que evacuar algunos habitantes de las viviendas rurales que presentaban riesgos, además de cortar caminos secundarios y terciarios por donde circulan vehículos rurales.
Asimismo, dijo que la Fiscalía de la ciudad de Dean Funes abrió una investigación sobre las dos personas que fueron encontradas muertas, una en las cercanías de San José de la Dormida y la restante cerca de Villa de María, en ambos casos con sus respectivos vehículos calcinados.
El hermano de uno de los fallecidos también fue encontrado con quemaduras en el 80% de su cuerpo y se encuentra en grave estado, internado en el Instituto del Quemado de la capital de Córdoba, informó el funcionario de Defensa Civil.