Un juez de la localidad de Huinca Renancó decidió decorar toda su oficina con los colores azul y amarillo, de Boca Juniors, para notificar a un niño de 11 años, que es fanático del club, que había una familia que decidió adoptarlo.
La empática idea fue del juez en lo Penal Juvenil Claudio Mazuqui, quien manifestó a Telediario Digital de Río Cuarto que tenía que comunicar una sentencia de adopción, y por tratarse de una “noticia importante y trascendental que iba a recibir para su vida decidimos ponernos en su lugar y hacerlo de una manera comprensible”.
Mazuqui decoró con “azul y oro” su dependencia con objetos tales como globos, cartulinas, gorros y otros elementos de cotillón con los colores de uno de los clubes mas populares del país.
“Qué hermoso”, fue lo que dijo el niño al ingresar a la oficina del magistrado y agradeció constantemente lo que se había hecho por él.“Es un hermoso niño y agradecido”, resaltó el juez, mientras que también le regalaron una camiseta de Boca con su nombre.
Pero el niño también sorprendió al magistrado “con una cartita de agradecimiento de su puño y letra en donde decía: “Juez, muchas gracias por traerme con esta familia hermosa y que me ama. Para mi amigo Claudio”.
El juez sostuvo que constantemente tienen que intervenir en situaciones de mucha sensibilidad y muy emotivas cuando hay una extrema vulneración de derechos, y que en las decisiones “siempre se busca que los niños estén con su familia de origen”, pero que en determinadas situaciones se deben tomar medidas excepcionales donde los niños pasan a estar con otra familia.
En este caso se trata de una “familia guardadora en proceso de adopción”, en donde el chico se siente “feliz con ellos” y ya cuenta con el documento con su nueva identidad, detalló.
En diciembre del año pasado, el mismo juez había trascendido en las redes sociales por haber adaptado a un cuento la notificación de una resolución de adopción a una niña de siete años, además de la participación de personas vestidas con temática de Disney