El acusado amenazó con un cuchillo a la víctima y le robó el celular.
Una empelada de 18 años le mordió y le arrancó un trozo de lengua a un joven que intentó abusar sexualmente de ella en el interior del comercio donde trabaja como empleada, con lo que logró hacer que huyera, aunque fue finalmente detenido, en la localidad santiagueña de Quimilí, informaron hoy fuentes policiales.
El hecho sucedió el 25 de abril último, aunque trascendió ahora, cuando el fiscal de la causa, Martín Silva, pidió la prisión preventiva del acusado, que fue concedida por el juez, según confirmó a Télam el propio representante del Ministerio Público.
El acusado, que permanecerá detenido hasta el juicio oral, fue identificado por los voceros como Nelson González (21), a quien se le imputa del delito de “abuso sexual simple en concurso real con robo agravado por el uso de arma blanca“, ya que amenazó con un cuchillo a la víctima y le robó el celular.
El fiscal Silva detalló en diálogo con Télam que ya se recibió la declaración de la víctima, quien ratificó todo y dio más detalles del episodio, por lo que ahora resta incorporar a la causa algunos testimonios y los análisis que se le harán al trozo de lengua amputado al acusado, que fue secuestrado y preservado para ser cotejado por personal de la Policía Científica en la capital provincial.
El hecho ocurrió cerca de las 22 del 25 de abril, cuando la joven empleada de comercio cerraba el local de venta de ropa situado en la zona céntrica de Quimilí, hasta donde llegó el ahora detenido.
“Ya había apagado las luces, agarrado su cartera y, se estaba yendo, cuando llegó un muchacho que le dijo que necesitaba un par de zapatillas. Ella le dice ‘volvé mañana’, pero y él le dice que necesitaba viajar a la mañana urgente”, reseñó el fiscal.
Entonces, según denunció la víctima, el joven logró entrar al local, donde la joven comienza a advertir una actitud extraña.
Por ese motivo, según el vocero judicial, la empleada intentó llamar por teléfono a unas primas para que fueran hasta el comercio, aunque el delincuente “cerró la puerta, apagó la luz y ahí se lanzó sobre ella, lo cual quedó filmado por las cámaras del local, en donde se ve todo claramente”.
El atacante instantes después volvió a prender la luz y exhibió un cuchillo que tenía en su poder, con el que redujo a la joven, a quien llevó hasta el interior de un probador, que cerró para evitar ser captado por las cámaras, añadió el fiscal.
Según la pesquisa, el agresor intentó sacarle la ropa y la besó a la fuerza, momento en que la chica le mordió la lengua y le arrancó un pedazo, que quedó en el suelo, detalló Silva.
“Eso provocó que él empezara a golpearla, provocándole lesiones en la nariz e incluso le arrancó un mechón de cabello, todo dentro del cambiador”, puntualizó.
Finalmente, en medio del forcejeo, la joven logró salir del probador, mientras que el atacante se apoderó de su teléfono celular y, sangrando, escapó del local.
“La chica sale, pide ayuda y justo pasaba un conocido de ella, por lo que van a la comisaria, hacen la denuncia y, como Quimilí es una ciudad chica, y este hecho es fuera de lo común, empieza a circular la noticia en las redes sociales. Así es que alguien avisa que en el hospital había un muchacho que tenía un corte en la lengua”, que fue detenido, indicó el fiscal.
Tras las curaciones de rigor, la policía apresó al acusado, cuyo domicilio fue allanado y se secuestró el celular que había robado a la víctima.
En tanto, los peritos que trabajaron en la escena del ataque hallaron manchas de sangre y secuestraron el trozo de lengua del imputado para un futuro cotejo. (Télam)