Intensos allanamientos en Chaco buscando pistas de Cecilia Strzyzoswki

Un empleado de la familia Sena complicó a sus jefes y la Policía busca el cuerpo.

Gustavo Melgarejo, empleado del campo de Emerenciano Sena, fue el único de los siete indagados ayer que declaró en la causa por el presunto femicidio de Cecilia Strzyzowski y en base a sus dichos, la policía de Chaco realiza hoy intensos allanamientos en un campo cercano a la finca de los Sena.

Melgarejo declaró que la noche en que desapareció Cecilia vio llegar a sus patrones en una camioneta a un predio que está a unos 15 kilómetros del establecimiento del que ellos son dueños. Una de las hipótesis es que allí se habría incinerado el cuerpo de la joven, que es la esposa de César Sena, hijo del dirigente piquetero Emerenciano Sena y su pareja, Marcela Acuña, los empleadores de Melgarejo que están detenidos, acusados del presunto femicidio de Cecilia.

Cecilia Strzyzowski está desaparecida desde el 1 de junio pasado -fue vista por última vez con su marido- y la sospecha es que fue asesinada; incluso la madre cree que a su hija la mataron. Hace días que la Policía busca sus restos.

La policía chaqueña llegó a las 9 al campo que está a unos 15 kilómetros de la finca de Sena. Allí desplegaron perros para buscar posibles rastros del cuerpo de Cecilia. El campo está ubicado a tres kilómetros de un camino que se desprende de la ruta 16. Estos nuevos rastrillajes fueron ordenados por la Fiscalía de Femicidios, que sigue al frente de la causa, y se producen en una zona de monte donde podría haber sido escondido el cuerpo de Cecilia, de acuerdo a los indicios que aparecieron en las últimas horas en la causa.

Ayer, las indagatorias se realizaron en un clima de máxima tensión, en medio de los preparativos para el cierre de la campaña electoral de la PASO chaqueñas, que serán este domingo. Nadie duda en Resistencia de que los estrechos vínculos entre el líder piquetero, considerado “el Milagro Sala” de Chaco, con el gobernador Jorge Capitanich influirán en el resultado electoral.

Cecilia Strzyzoswki, de 28 años, fue vista por última vez en Resistencia, cuando se disponía a viajar a Ushuaia junto a su esposo. El joven se encontraba prófugo desde el viernes, después de que el fiscal Sergio Cáceres Olivera, ordenara un pedido de captura en su contra, al hallar contradicciones en la declaración del sospechoso. Un día después César Sena se entregó. Sus padres, ambos líderes del partido Socialistas Unidos por el Chaco, ya habían sido detenidos. El caso empezó a calar hondo y tener una fuerte repercusión, por los indicios que señalan que el clan familiar podría haber actuado en la desaparición de la joven.

Los familiares de Cecilia Strzyzoswki se instalaron en el estudio jurídico de la abogada Carina Gómez, tía de la joven de 28 años desaparecida. Una de las abogadas que participa de la querella de la familia fue seguida este lunes por un auto desde su casa a su trabajo. “Nos quieren intimidar”, dijo Gómez.

El matrimonio piquetero cambió a último momento de abogado. Asumió la defensa de Sena y Acuña el penalista Juan Carlos Saife, un hombre de peso en la justicia chaqueña. Lo que sorprendió es que, por ahora, César, el principal sospechado de la desaparición de Strzyzoswki, no comparte defensa con sus padres. Hoy se supo, además, que el joven cambió de abogado.

La familia de Cecilia está convencida de que hay un pacto de silencio entre la familia piquetera. Este martes el fiscal Olivera, a cargo de la investigación, admitió que “no se puede descartar ni afirmar que Cecilia haya sido descuartizada”; dijo que esa “es una hipótesis, una línea investigativa”. En esa línea, la familia Strzyzoswki teme que en el campo de Sena, donde la familia de César criaba animales, haya ocurrido “lo peor”.

El domingo pasado se realizó un allanamiento en uno de los campos de la familia, una propiedad de unas 100 hectáreas donde se producen chacinados ubicado en una zona rural de la localidad de Campo Rossi, del departamento chaqueño de 1° de Mayo. Se encontraron restos óseos que están siendo analizados; entre ellos, un fémur. Pero por lo que señalan las fuentes policiales ese rastro no pertenecería a Cecilia.

Una hipótesis es que el cuerpo podría haber sido incinerado, según señalaron los familiares de la víctima. Por eso, son escépticos de que se pueda encontrar el cuerpo de la joven de 28 años.