Durante la noche del domingo, también clausuraron un evento no autorizado en Los Cedros.
En la madrugada de este domingo, la Policía de Córdoba desarticuló un after con más de 1600 personas.
La fiesta clandestina ocurrió en un club deportivo ubicado en Defensa al 800 de B° Villa Joison, donde también se encontraban más de 300 vehículos.
En el lugar, ademas de controles realizados a las personas presentes, se secuestraron equipos de música (parlantes, potencias, consola de sonido), bebidas alcoholicas, varias dosis de estupefacientes y luces multiefectos, entre otros elementos.
“El operativo se concretó luego que operadores de cámaras de videovigilancia del 911 constataran la presencia de este contingente en el lugar”, informaron desde la Policía.
“A primera hora recibimos la información que se estaba realizando una fiesta clandestina en la ciudad, en Barrio Joison. Rápidamente nos pusimos en contacto con la Municipalidad de Córdoba para realizar un operativo conjunto con la Subsecretaría de Fiscalización y Control. El trabajo conjunto con los municipios es clave”, expresó el ministro de Seguridad, Juan Pablo Quinteros, quien encabezó el operativo.
“Llegando al lugar hablé con el intendente Daniel Passerini, quien tiene la misma visión acerca de esta problemática: la salud de nuestros jóvenes no se negocia”, agregó.
Horas antes, las autoridades habían logrado desactivar otro after clandestino en la Estancia La Clara, en la localidad de Los Cedros, a diez kilómetros de la capital provincial.
El operativo se llevó a cabo en horas de la tarde del sábado, en la previa de la presentación del DJ Mariano Mellino en el mencionado establecimiento de barrio Talleres. El personal actuante identificó al promotor de la mencionada fiesta y luego de entrevistarlo, confirmó la cancelación de la misma.
“A partir del trabajo de la dirección de investigaciones criminales hemos identificado un modus operandi: una vez culminados fiestas electrónicas con DJs de renombres, se organizan afters de manera clandestina, en lugares no habilitados donde no existen medidas de seguridad, hay comercialización de drogas y un gran movimiento de dinero proveniente de entradas y cobros de estacionamiento”, señaló Quinteros.