El proyecto está en la Cámara de Diputados, pero como es rechazado por la oposición, le piden a Alberto Fernández que “use la lapicera”.
Los diputados kirchneristas llevaron esta semana a la Cámara Baja unos carteles que piden por un “Salario Básico Universal Ya”. Se trata de un proyecto presentado por el legislador Itai Hagman, quien responde a Juan Grabois, y que cuenta con el visto bueno de la vicepresidenta Cristina Kirchner.
En pocas palabras, ese mal denominado “salario” que impulsa el proyecto y que desde la oposición rechazan al señalar que un “salario es lo que se paga a los que trabajan”, sería en realidad una especie de “IFE permanente”, con el valor de la canasta básica alimentaria para un adulto, que en el último mes se ubicó en 14.401 pesos.
El kirchnerismo sabe que la iniciativa no pasaría por la aprobación del Congreso, donde la mayoría opositora lo ve como “un retroceso a la necesidad de generar más fuentes de trabajo y producción en lugar de seguir distribuyendo pobreza”, y por eso le piden al presidente Alberto Fernández que “use la lapicera que le dio Cristina” y lo saque por decreto.
De hacerlo, alcanzaría a casi 14 millones de argentinos que hoy no tienen trabajo o están con empleos precarios. Llegaría también a trabajadores que tengan ingresos inferiores a 38.850 pesos, entre los que se cuentan, por ejemplo, las empleadas domésticas.