Muñeca Brava es una novela argentina icónica que consiguió meterse en el mercado internacional como nunca antes lo había conseguido otra ficción. De esta forma, Natalia Oreiro, se convirtió en un boom en Rusia y ese amor recíproco entre la actriz y sus ciudadanos se extendió por casi dos décadas. Tanto es así que en las últimas horas se confirmó que la cantante y su hijo obtuvieron la nacionalidad rusa por un decreto de Vladimir Putin.
La actriz había presentado los papeles hace varios años y finalmente, este lunes apareció su nombre y el de Merlín Atahualpa Mollo (9), publicado en el Boletín Oficial de Rusia. Aunque hasta el momento Oreiro no fue notificada, los medios soviéticos lo dan por hecho.
En varias oportunidades ella había resaltado su amor por aquel país con frases como: “Me falta que Putin me dé el pasaporte”, “no existe otra extranjera más rusa que yo”. Sin embargo, aseguró que su intención no era irse a vivir allá sino que lo tomaba como un “honor desde el punto de vista simbólico” y una “manera de agradecer al pueblo ruso por todo el amor” que le dan.
En agosto del 2020, Netflix lanzó el documental “Nasha Natasha” (Nuestra Natalia), en el que mostró el detrás de escena del maratónico tour por 16 ciudades que hizo en la cantante en el 2014. Pero esa no fue la última oportunidad en la que viajó hasta el país. Kaliningrado, Kazán, Krasnodar, Krasnoyarsk, Moscú, Nizhni Nóvgorod, Novosibirsk, Perm, Rostov del Don, San Petersburgo, Toliatti, Voronezh, Yaroslavl y Yekaterimburgo, fueron las localidades que le abrieron las puertas en sus últimos shows en el 2019.
Además, en cuanto se conoció que llegaría a la Argentina la vacuna Sputnik fue la primera defensora. “Si hay que darse la vacuna contra el Covid-19, me doy la rusa, sin dudarlo”, aseguró en aquel entonces.