Los dueños de la hamburguesería lograron evitar el asalto.
Tres delincuentes, entre ellos una mujer que se hizo pasar por clienta, intentaron asaltar una hamburguesería del partido bonaerense de Merlo, pero los dueños del local se defendieron con gas pimienta, pusieron en fuga a la banda y evitaron el robo, informaron hoy fuentes policiales y dos de los comerciantes.
Si bien trascendió hoy por la difusión de los videos de las cámaras de seguridad del local, el hecho ocurrió el martes pasado por la noche en un comercio en el ya mencionado partido del oeste del conurbano.
“Eran tres delincuentes. Los delincuentes simularon comprar pero realmente iban a robarnos. Una mujer se acercó como clienta para hacer un pedido y tardó unos cuarenta minutos en volver, pero cuando lo hizo volvió con otras dos personas para robarnos”, contó esta mañana Jonathan, dueño del lugar al canal C5N.
“Nunca pensé en un robo, lo que sí pensé es que era una broma, un pedido falso y no lo iban a retirar más”, contó el comenrciante.
Es que, por lo que explicó, la mujer “primero pidió un combo de hamburguesa, luego dos y hasta pidió cinco y se fue a esperar el pedido a la esquina”.
“Después de 40 minutos apareció ella y dos personas que intentaron ingresar al local metiendo una mano para abrir el picaporte desde una ventanita que es utilizada para la atención al público”, aclaró el joven.
“Mi cuñado, mi novia y los chicos que trabajan desde adentro se dieron cuenta rápido y reaccionaron con gas pimienta y trabaron la puerta como pudieron. Los delincuentes comenzaron a patear la puerta pero se fueron sin robar nada”, contó Jonathan.
En uno de los videos, se ve cómo uno de los asaltantes, con gorra con visera, se frota los ojos afectado por el gas irritante, tras lo cual el trío de ladrones se va del lugar.
Por su parte, Emanuel, uno de los empleados dijo: “Todo fue muy raro porque la mujer hizo los cinco pedidos. Yo al ver por la computadora cómo de manera sutil mete la mano por el picaporte para intentar abrir la puerta, agarré el gas pimienta que estaba al lado de la caja registradora y les tiré”.
El empleado dijo que él no tenía planeado actuar de ese modo y más cuando uno de los ladrones “tenía un arma que apuntaba a todos”, pero explicó que el gas pimineta era de su mujer “porque hace dos años sufrió un robo por motochorros”.
“Gracias a Dios no paso nada más”, concluyó Emanuel.
La denuncia fue realizada por las víctimas en la comisaría 4ta de Merlo, donde le entregó a la Policía una copia del los videos de las cámaras de seguridad del lugar para ver si logran identificar a los delincuentes.