A pesar de la disminución de emisiones por la pandemia del coronavirus, expertos advirtieron que la concentración de dióxido de carbono (CO2) alcanzó su máximo histórico este mes.
Tanto la organización Greenpeace como el meteorólogo Mario Picazo dieron cuenta de que la lectura mensual de concentración media de CO2 atmosférico es la más alta registrada.
Picazo trabaja en The Weather Network y El Tiempo. Además es profesor de Meteorología y Cambio Climático en la Universidad de California. “Aunque la reducción de emisiones ha sido dramática en marzo, abril y mayo, no parece ser una tendencia a largo plazo”, afirma.
Los datos fueron aportados por el observatorio Mauna Loa en Hawaii. Este instituto midió una concentración media de CO2 atmosférico de 417.1 partes por millón (PPM), la cual superó por 2.4 PPM al máximo registrado en 2019.
El meteorólogo explicó en Twitter que la acumulación de CO2 “es algo así como la basura que se amontona en un vertedero”. Por lo tanto, “a medida que seguimos emitiendo, se sigue acumulando durante años”. Consignó que la crisis del coronavirus “ha ralentizado las emisiones, pero no lo suficiente como para cambiar el rumbo de su impacto en el clima terrestre”.
El aumento de la concentración de CO2 en el aire, se debe a la quema de combustibles y la disminución de la vegetación en todo el mundo.
Picazo explica que, pese a que hubo una disminución de las emisiones diarias de CO2, ese descenso no se refleja de momento en los datos de las medidas realizadas en Mauna Loa y es posible que a largo plazo, ni se llegue mucho.
Esto se debe a que una vez en la atmósfera, el CO2 es muy difícil de eliminar, y puede seguir afectando el clima terrestre durante miles de años.