Tres delincuentes los sorprendieron dentro de la vivienda y les robaron sus ahorros. Al joven lo maniatado y le pusieron una bolsa en la cabeza.
Una jubilada de 78 años murió de un infarto mientras veía cómo tres delincuentes maniataban, tapaban la cabeza con una bolsa y golpeaban a su hijo durante un violento asalto en su domicilio de la localidad mendocina de Guaymallén. La mujer vio la terrible escena, se descompensó y falleció, pese a que fue socorrida por familiares y vecinos cuando los malvivientes se retiraron.
Según relató el fiscal Gustavo Pirrello que investiga el hecho, todo ocurrió este martes por la mañana, cerca de las 10, en una casa donde residía la víctima, identificada como María del Carmen Costable, junto con su hijo.
Un llamado a la línea de emergencia 911 alertó a las autoridades sobre una mujer con signos de tener un preinfarto, por lo que enviaron un móvil policial a la dirección indicada por el denunciante. Una vez en el lugar, constataron que estaba descompensada, por lo que comenzaron con la realización de maniobras de Reanimación Cardiopulmonar (RCP), con resultado negativo, y se dio intervención al Cuerpo Médico Forense.
Los investigadores entrevistaron al hijo de la víctima sobre el hecho y relató que él horas antes se encontraba durmiendo cuando lo sorprendieron tres sujetos que, sin mediar palabras, le taparon la cabeza con una bolsa y bajo amenazas lo redujeron y lo maniataron mientras le pedían el dinero que creían había dentro de la propiedad.
En este contexto, mientras revisaban la vivienda buscando el dinero, llevaron a su madre al dormitorio donde él estaba maniatado, ella observó la escena y en qué estado se encontraba su hijo, se descompensó y cayó al piso. Los delincuentes, según lo dicho por la víctima del robo, recorrieron la vivienda y se dieron a la fuga llevándose 30.000 pesos. El hombre, tras desatarse, trató de asistir a su madre junto a un grupo de vecinos que le hicieron RCP, y ante la no reacción de la mujer dio aviso a la línea de emergencia.