SUQUIA
¿Por qué deberías verla y por qué no?, en palabras de nuestro especialista Flecha Lástrico.
Llega una de las secuelas más esperadas del año. Los seguidores de la saga John Wick, que son multitud, se encontrarán en esta cuarta entrega con algo más grande, más audaz, más largo, más malo y que casi se reduce a la acción pura. Detalles que pueden verse como halagos o criticas, según el ojo de quien lo lea. Para los seguidores un plato fuerte y para los que recién llegan deberán informarse un poco de la leyenda que construye y sus ingredientes.
Básicamente John Wick es un asesino a sueldo que quiere zafar y no puede de una organización delictiva y poderosa, y que hace su trabajo de manera casi infalible. Un condenado a triunfar. Además, está el protagonista perfecto que es Keanu Reeves, con su propia construcción legendaria, su personalidad, elegancia y esa carga de rufián melancólico que despanzurra enemigos pero tiene dimensión trágica.
La película tiene a favor muchas cosas: escenas coreografiadas de acción absolutamente increíbles, que incluyen todo tipo de armas y autos a máxima velocidad; mezcla de vehículos con lucha callejera; y laberintos con cientos de perseguidores. Y aprovecha maravillosamente los escenarios de Berlín y Paris. Algunas escenas son asombrosas, como una pelea en un club nocturno gigantesco donde la acción transcurre entre bailarines que apenas notan los enfrentamientos o una desarrollada en el Arco de Triunfo con movimientos y cantidad de asesinos.
Los actores que lo acompañan son imprescindibles: Horoyuki Sananda, Donnie Yen, Lawrence Fishburne, Bill Skarsgard (un villano siempre a la altura), Ian McShane y Lance Reddick (que falleció recientemente).
La película es larga y no da respiro. Casi no tiene humor, aunque causa sensación una perra letal que se roba las escenas. Se deja para el final una escena que vale la pena, con emoción y sorpresa. Técnicamente es irreprochable, destacándose una ecléptica banda sonora que potencia la acción desmedida de una saga que está lejos de terminar.
CALIFICACIÓN: ↗️↗️↗️↗️
