Los menores somalíes se enfrentan a unas condiciones extremas por verse obligados a ser tratados de sus enfermedades en pésimas condiciones.
Agencias Télam y Europa Press.
El número de niños de entre seis y 59 meses en peligro de sufrir desnutrición aguda en Somalia aumentó un 33% en los últimos once años, desde 386.000 a 513.000, alertó hoy el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), que no descartó una eventual hambruna en uno de los países más pobres del mundo que a la vez registra un cruento panorama político-social.
El vocero del organismo, James Elder, lamentó que los menores somalíes se enfrentan a unas condiciones extremas por verse obligados a ser tratados de sus enfermedades en pésimas condiciones.
En este contexto, Elder advirtió que “los niños gravemente desnutridos tienen hasta once veces más posibilidades de morir a causa de diarrea y sarampión que los que están bien alimentados”.
El funcionario dijo que esas dos dolencias están aumentando en una región que se dirige hacia una hambruna, según la agencia de noticias Europa Press.
“Los brotes de enfermedades se han disparado entre enero y julio, con al menos 8.400 casos sospechosos de diarrea acuosa aguda/cólera y alrededor de 13.000 casos sospechosos de sarampión”, añadió Unicef.
Por tanto, en vista a las cifras de desnutrición y enfermedades que asolan Somalia, el organismo abogó por “un cambio radical” para evitar que la hambruna se repita, por lo que reclamó que las naciones donantes de mayores recursos se comprometan a una financiación a largo plazo.