SUQUIA
La mujer es vecina de Alta Gracia y vive un verdadero calvario.
Cansada de la inoperancia de la Justicia y en un estado de desesperación, Evangelina, vecina de Alta Gracia, decidió hacer público su caso: el de una mujer víctima de violencia y totalmente desamparada.
La mujer denunció a su hermano luego de que éste la atacara a golpes salvajemente y, según aseguró, estuvo casi tres horas en la Unidad Judicial con el rostro todo marcado, esperando que la atendieran y le tomaran su denuncia.
En diálogo con RESUMEN de la Región, Evangelina confesó que en realidad ha sido víctima de múltiples ataques a lo largo de su vida y que lo que ocurrió en las últimas horas, fue “la gota que colmó el vaso”.
“Yo estaba durmiendo con mi hijo en la pieza cuando escuché gritos afuera de la casa, salí a ver que pasaba y cuando mi hermano me vio se transformó, parecía que había visto el diablo. Me agarró a golpes, yo me desvanecí y mi hijo mayor se mete y le pega, encima mi papá salió en defensa de él, de mi hermano, le dijo a la policía que yo me había pegado sola y acusó a mi hijo de golpear a mi hermano. Mi hijo sí le pegó pero fue para defenderme a mi. Esa noche así como estaba, mi papá nos echó a la calle y tuve que salir a la media noche a golpearle la puerta a mi tía para que nos dejara quedarnos ahí”, contó angustiada la mujer.
Evangelina estaba viviendo en la casa de su padre junto a sus dos hijos de 4 y 16 años, hace apenas algunos meses; tras la muerte de su mamá. “Ella era la única que me ayudaba y después de que murió yo salí de donde estaba alquilando, me fui a vivir con mi padre porque él me lo suplicó. Me dijo que no sabía que medicación tomar, es insulinodependiente, y yo le creí. Él toda su vida fue un golpeador pero yo lo perdoné. Después de estar un tiempo en su casa volvió todo como antes y cambió por completo, empezó a insultarme y tratar mal a mis hijos y el problema con mi hermano es porque yo siempre estuve en contra de la violencia y siempre defendí a sus ex parejas”, añadió.
Su exmarido golpeador salió de la cárcel y también la amenaza
En 2019, la Policía detuvo a la expareja de Evangelina, luego de que éste la golpeara con una botella mientras se conducían a bordo de un automóvil. “Él casi me mató porque me quebró una botella en la cabeza mientras iba manejando, después de eso mi vida se vino abajo porque hasta me dejaron sin trabajo y tuve que salir adelante sola con mis hijos”, recordó la mujer.
El agresor fue condenado en 2020 y hace pocos meses recuperó la libertad; algo que tampoco tiene tranquila a la víctima. “A pesar de las amenazas y las denuncias que hice por eso, él ya está en la calle y a mi el gobierno nunca me avisó. Esas son las cosas que ya no aguanto mas”, agregó.
Lo que Evangelina necesita ahora es un techo para ella y sus hijos. “Quiero alquilar, estoy trabajando pero ahora con estos golpes y los coágulos que tengo en la cabeza no puedo hacer nada. Necesito que alguien me ayude”, culminó.
Su contacto: 3547 466286
El vídeo de la denuncia: