Rabbit R1 y Ray-Ban Meta son aparatos que buscan simplificar las interacciones constantes con la tecnología, poniendo un énfasis en las pantallas.
La inteligencia artifical está siendo furor, empresas como Meta y Humane junto a diversas iniciativas como Rabbit, lanzaron al mercado dispositivos que intentan dejar atrás a los teléfonos móviles y las grandes pantallas.
La compañía Ray-Ba, de Mark Zuckerberg, apostó por el desarrollo de unas gafas inteligentes Ray-Ban a 299 dólares, que cuentan con cámara y micrófono. Entro lo más destacado, se encuentra la traducción en vivo de gran cantidad de idiomas, también respuestas avanzadas y la asistencia general en tareas cotidianas, pero también enfrentan ciertos desafíos en funcionalidades básicas.
Según The Wall Street Journal, quienes realizaron un comparativo con los tres dispositivos, las Ray-Ban Meta tuvieron a favor el rendimiento en cuanto a respuestas contextuales, especialmente en tareas específicas como el cuidado de mascotas.
Frente a las preocupaciones sobre la recolección de datos y anuncios personalizados intrusivos,_Meta asegura que las fotos y videos capturados por sus dispositivos no se utilizan para este fin, aunque su política de servicio deja abierta la posibilidad de usarlos para mejorar sus productos.
Aunque las promesas de traducción en vivo de Humane y Rabbit han generado grandes expectativas entre los usuarios, la experiencia no siempre cumple con las promesas.
Durante una prueba con el dispositivo Rabbit R1, se experimentaron dificultades significativas en la traducción de frases simples, llegando a ser más práctico buscar manualmente la información requerida. Aunque se anunció una actualización del software que corregiría esta falla.
En contraste, el AI Pin demostró ser capaz de sostener conversaciones reales entre diferentes idiomas, aunque enfrentó inconvenientes al traducir erróneamente al español en un contexto donde se esperaba mandarín, lo que requirió un reinicio del dispositivo para solucionarse.
En relación con la asistencia general, es notable que estos asistentes avanzados superan opciones como Siri o Alexa al proporcionar detalles precisos sobre tareas específicas, como plantar tulipanes o preparar un bistec.
La visión futura de asistentes personales capaces de anticipar y atender nuestras necesidades representa un avance en la tecnología con inteligencia artificial.
Estos dispositivos, que podrían integrarse de manera más profunda en nuestra vida diaria y conectarse con nuestros dispositivos más esenciales, señalan un cambio hacia interacciones más humanas y menos dependientes de pantallas.
El objetivo apunta hacia agentes de inteligencia artificial capaces de anticipar y satisfacer las necesidades de los usuarios de manera proactiva, integrando estas capacidades en dispositivos que se conviertan en herramientas esenciales en la vida cotidiana debido a su capacidad de interpretar el mundo que nos rodea y establecer una conexión profunda con los usuarios.