Efraín Delgado caminó seis kilómetros por día para hacer el primario y luego ocho para completar sus estudios en Chaco. Fue el mejor alumno de su curso.
Hace cinco años conmovió al país la historia de un niño qom que caminaba seis kilómetros por día para ir a la escuela y, con el acompañamiento de su abuelo, logró completar el primario en una escuela rural del Chaco.
Ahora, la historia vuelve a entregar un capítulo de ejemplo porque Efraín Delgado, el chico en cuestión, completó el secundario, fue el mejor alumno de su curso y volvió a sacarse la foto abrazado con su abuelo para un informe de TN.
La difusión de lo que vivió Efraín le permitió recibir ayudas, primero dos bicicletas que le regaló el club Estudiantes de la Plata y, luego, una moto que le obsequió su abuela.
Sin embargo, el esfuerzo de no faltar nunca y de convertirse en el mejor alumno bien le valieron una nueva vuelta para repasar sus virtudes, su voluntad y ganas de progresar.
Ahora cuenta que quiere ser profesor de educación física, y sin dudas, por su firmeza y temple, lo logrará.