Mientras esperaba su vuelo, el joven se durmió sin percatarse de que había sido dejado atrás por la coordinadora de su excursión.
Lautaro, un estudiante de secundaria de Mar del Plata, vivió una experiencia desafortunada durante su primer viaje solo. Mientras esperaba su vuelo de regreso en el aeropuerto de Bariloche, el joven se durmió sin percatarse de que había sido dejado atrás por la coordinadora de su excursión de viaje de egresados.
Fueron los propios padres del adolescente, quien tiene 17 años y está a punto de graduarse de la escuela Saavedra Lamas, quienes se enteraron de la situación a través de un mensaje de texto del joven. “Ayer a las diez de la mañana me envió un mensaje diciendo que se había quedado dormido y que su grupo se había ido, y que estaba solo en el aeropuerto. Al principio pensé que era una broma, ¿cómo podría ocurrir algo así?“, relató el padre. Sin embargo, confió en las palabras de su hijo cuando le aseguró que todo saldría bien.
Ante la preocupación, el padre recomendó a Lautaro que buscara a un agente de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA). Finalmente, alguien de la empresa de viajes Max Dream, responsable del periplo, acudió al aeropuerto para buscar al joven. “No sabía qué pensar, porque alguien desconocido lo estaba llevando solo de vuelta al hotel. Se te pasan muchas cosas por la cabeza. Tuve que confiar en alguien a quien nunca había visto antes“, expresó el hombre.
La noticia del olvido de Lautaro fue inicialmente compartida en Twitter por una prima suya, quien publicó: “Los de Max Dream se olvidaron a mi primo en el aeropuerto, jajajaja“. Acompañó el mensaje con una captura de pantalla de una conversación con la madre del chico.
La mamá del joven no tardó en reaccionar: “Qué desastre, yo la mato a la coordinadora“. En ese momento, el adolescente aún se encontraba en el sur, mientras que sus compañeros ya habían llegado al Aeroparque metropolitano y abordado otro vuelo que los llevaría de regreso a Mar del Plata. Lautaro, por su parte, tuvo que hacer el último tramo en autobús.
“Los gerentes nunca aparecieron, solo accedieron a hablar con periodistas para dar declaraciones y explicar lo sucedido, pero no nos atendieron a nosotros. En ningún momento se hicieron responsables, en todo caso, argumentaron que la aerolínea era la responsable“, indicó el padre.
Luego, agregó: “Ningún responsable se puso en contacto conmigo ni dio la cara. Su comportamiento fue realmente malo. Además, en el grupo de padres surgieron otros comentarios sobre situaciones que no deberían haber ocurrido. Ya he consultado con un abogado y ya no tengo nada más que hablar con ellos“.