“Respira con dificultad pero está vivo”, lanzó uno de los socorristas que procuran rescatar del pozo de 32 metros de profundidad en el que Rayan, un niño marroquí, cayó hace cinco días.
La cámara de los rescatistas mostraba esta mañana que Rayan se movía y su padre confirmó: “Le hablé de lejos por radio, escuché su respiración, respira con dificultad pero está vivo”, afirmó conmovido el rescatista, según la agencia italiana ANSA.
En tanto, el equipo técnico que trabajaba para intentar liberar al niño de cinco años logró alcanzar con el pozo paralelo la misma profundidad a la que se cree que estaría el niño, y ya ingresaba al túnel para rescatar a Ryan, consignaron las agencias DPA y AFP.
Un equipo médico entró con una camilla en el túnel donde llevan más de una hora dentro y cerca del pozo se encuentra una ambulancia equipada con los padres de Rayan dentro.
En la zona hay un amplio dispositivo de seguridad y varios técnicos, y efectivos de la Protección Civil, Ingeniería Civil, expertos en Topografía, además de efectivos de la Gendarmería Real y las Fuerzas Auxiliares que formaron una barrera de seguridad para evitar el acercamiento de los ciudadanos al lugar de rescate.