El miércoles pasado, Ámbar y su familia vivieron momentos de desesperación, cuando la niña se ahogó con un juguete. Todo ocurrió en su casa de barrio Juniors. Dos agentes policiales la asistieron y después, se convirtieron en los invitados de lujo de su cumpleaños.
Su papá, Matías, contó que estaban esperando a las doce para cantarle el cumpleaños junto a la mamá y la hermana, pero de repente su hija empezó a toser y no podía respirar. Cuando se dieron cuenta que Ámbar se había ahogado con un juguete, por lo que salieron desesperados en el auto a buscar ayuda.
En ese momento pasó el móvil policial del CAP VII, con los agentes Brenda Sandoval y Alexis Papurello, quienes no dudaron en socorrerlos. Inmediatamente comenzaron con las tareas de primeros auxilios, hasta que llegaron a la clínica más cercana.
Alexis señaló que cuando recibió a la niña en sus brazos, casi no podía respirar, aun cuando le realizaba las maniobras de Heimlich. Su compañera, Brenda, manejaba el móvil a toda velocidad hacia el hospital, donde personal médico continuó con las maniobras y lograron desobstruir las vías aéreas.
Ámbar logró recuperarse para poder festejar sus dos años junto a su familia, y los efectivos que fueron invitados al cumpleaños como muestra de agradecimiento.