La trabajosa unidad que venía sosteniendo el radicalismo se rompió en las ultimas horas, cuando se conoció que Mario Negri negoció con el propio Macri una lista “mixta” con el PRO (Con Gustavo Santos a la cabeza).
La jugada de Negri puso en crisis el acuerdo básico al que habían llegado las diferentes tribus del radicalismo: el propio jefe del Interbloque al Senado y Rodrigo de Loredo como cabeza de lista de Diputados.
Luego de la fuerte interna radical del verano pasado, con un virtual empate técnico, SUMAR inicio un acercamiento con Negri y Ramon Mestre. El corolario de la paz radical se dio cuando Rodrigo de Loredo se bajo de su carrera a Senador y acordó la diputación acompañando a Negri. Mestre iría de tercer diputado. Todo ello entro en crisis con la jugada unilateral de ayer.
Resta ver como siguen los referentes del radicalismo. Por un lado, si Mario Negri igual avanza con el PRO (ya sin SUMAR y los intendentes de su lado) y que harán Rodrigo de Loredo y el propio Mestre.
También falta saber la postura que tomará el polo conformado por Dante Rosssi, Sergio Piguillen y Juan Gait, que ya habían postulado a Myrian Prunotto y otros intendentes de exitosa gestión y que miden bien en una lista pura radical.
De Loredo debe definir si compite con lista propia o busca una boleta amplia cediendo el Senado a Luis Juez. Esta propuesta contaría con el respaldo de numerosos intendentes y con un posible guiño desde Buenos Aires. La vocación de Negri de pelear el lugar de Juez no parece haber achicado al líder del Frente Cívico.
Hay cambios minuto a minuto, lo que está claro es que rota la unidad radical por la jugada de Negri la pelea podría ser Negri – Santos contra Juez – De Loredo.
Pero faltan algunas horas y todo puede pasar todavía.