Fue en el allanamiento que se realizó ayer por la tarde en una propiedad de Nordelta. También requisaron propiedades de Insaurralde y Jesica Cirio.
El juez federal Ernesto Kreplak secuestró casi 600 mil dólares y varios objetos de valor en el allanamiento que se realizó ayer a la tarde en la casa donde vive la modelo Sofía Clerici, en Nordelta, pudo saber Infobae de fuentes judiciales. También allanaron propiedades de Martín Insaurralde y Jesica Cirio.
En el allanamiento en la casa de Clerici, se secuestraron 657.900 dólares, 2 millones de pesos, y más de 2 millones de pesos uruguayos. Además, la Policía Federal incautó bienes suntuarios, dispositivos electrónicos y anotaciones.
Ayer también se allanaron tres domicilios correspondientes a Insaurralde. Aunque el ex jefe de Gabinete de la provincia no estaba, la Policía ingresó a las viviendas y se llevó dispositivos y pendrives.
La semana pasada, el fiscal Sergio Mola había pedido más de 20 allanamientos, pero el juez hizo lugar a siete procedimientos en el marco de la causa que investiga a Martín Insaurralde, que está imputado por lavado de dinero y enriquecimiento tras el escandaloso viaje a Marbella. En la misma causa están imputadas la modelo Sofía Clerici y su ex esposa, Jesica Cirio.
Entre los lugares allanados figuran dos departamentos en un edificio del barrio de Palermo a nombre de Cirio, donde la Policía tenía una orden para requisar y buscar objetos de valor, dos domicilios de Clerici (uno en Nordelta y otro en Vicente López), y tres propiedades correspondientes a Insaurralde, entre ellos el country Fincas de San Vicente.
La investigación judicial por el escandaloso viaje a Marbella está bajo secreto de sumario desde el 10 de octubre. La medida fue dispuesta por el juez Kreplak, a pedido del fiscal Sergio Mola, y vence esta semana.
Al comienzo de la investigación, el fiscal había reclamado que se dicte la inhibición de los bienes para Insaurralde y la modelo Sofía Clerici y pidió las declaraciones juradas del intendente de Lomas de Zamora en uso de licencia y los recibos de sueldo desde que ingresó a la función pública. También pidió que se levante el secretario fiscal y bancario respecto a Insaurralde, su ex esposa Jesica Cirio y Clerici.
Antes de imponer el secreto de sumario, Kreplak ordenó varias medidas: le pidió informes a la AFIP, al Banco Central, a la CNV y a una docena de organismos públicos. Además, le reclamó a la Unidad de Información Financiera (UIF) que le consulte a sus pares de España y Uruguay sobre la posible existencia de reportes de operaciones sospechosas. En el primer país se realizó el viaje que destapó el escándalo y en el segundo se habría abierto una cuenta bancaria en el marco del divorcio de Insaurralde y Cirio.
Durante su estadía en Marbella, entre el 15 y el 21 de septiembre, Insaurralde firmó varios decretos. Por ese motivo, la ex vice de la UIF, María Eugenia Talerico, lo denunció por dos delitos: incumplimiento de los deberes de funcionario público y falsedad ideológica de documento público.
Según esa presentación, Insaurralde debería haber pedido una licencia, lo que hubiera activado el mecanismo de sustitución de su firma.
Unas horas después, Talerico amplió la denuncia y pidió que también sea investigado el gobernador Axel Kicillof, quien públicamente dijo que no sabía del viaje de su jefe de Gabinete. “No podemos descartar la participación del Gobernador en la falsedad instrumental en la medida que no resulta verosímil el desconocimiento de la ausencia de Insaurralde de la República Argentina o en su caso, el incumpliendo de las normas que imponían conforme al Decreto 11/2020″, destaca esa denuncia.
La Justicia todavía no pudo determinar quién es el dueño del yate “Bandido”, utilizado por Insaurralde y Clerici para navegar por el Mediterráneo. En los tribunales de Lomas, nadie cree la versión que dio la modelo cuando presentó un escrito.
Tampoco se pudo confirmar si los regalos de lujo que mostró Clerici en su cruenta de Instagram fueron comprados por Insaurralde. Hasta ahora, hay un informe de la Aduana que asegura que esos objetos no ingresaron en las valijas de los dos protagonistas del escándalo. Al menos no fueron detectados por los escáners del aeropuerto de Ezeiza.