Será en Argentina, tendrá más de 500 invitados y la novia tuvo que firmar un contrato de confidencialidad para no filtrar nada a la prensa.
La boda de Ricky Montaner y Stefi Roitman es una de las más esperadas del último tiempo. Pero, a pesar de la curiosidad y las ganas de saber cada detalle de cómo será la celebración, la pareja mantiene un fuerte secretismo alrededor de la fiesta en la que oficializarán su vínculo este sábado 8 de enero.
Lo que se sabe hasta ahora es que el evento contará con más de 500 invitados y se realizará en un salón de estilo campestre en la zona de Exaltación de la Cruz. El lugar es amplio, ya que se contempló la situación sanitaria, y la ceremonia será mixta, con un rabino y un pastor, porque ella es judía y él evangélico.
Para resguardar la privacidad del evento, no estará permitido el uso de teléfonos celulares y los invitados deberán dejarlo en un locker para no hacer ninguna foto o video que pueda filtrarse.
Un dato polémico: no solo los proveedores de la fiesta tuvieron que firmar un contrato de confidencialidad, sino que la misma Stefi tuvo que hacerlo comprometiéndose a no filtrar nada a la prensa.
La boda se estima que saldrá más de 20 millones de pesos y la organizadora principal fue Marlene Montaner, la madre del novio.
Van a tocar varias bandas en vivo y habrá varios DJ muy tops, pero rotativos. Sobre los invitados, estarán Sebastián Yatra, Marc Anthony y se espera la confirmación de Ricky Martin.
El vestido de la novia será del diseñador argentino Justo Ocampo y tendrá tres cambios durante la noche. Otro de los outfits estará a cargo del diseñador Jorge Rey, también nacional.