El intendente Martín Llaryora presidió este lunes la reapertura de la escuela Dr. Antonio Sobral, ubicada en barrio Parque del Este, ex Sangre y Sol.
El edificio tendrá un servicio de dos multigrados, uno para primer ciclo (1, 2 y 3er grado) y otro para el segundo ciclo (4, 5 y 6to grado), con una matrícula inicial de 18 estudiantes de nivel primario y 14 en el nivel inicial.
Por la alta demanda educativa que hay en el sector, ya que se trata de una escuela ubicada en barriadas populares, se prevé que la matrícula del mencionado establecimiento crezca rápidamente.
“No solo celebramos la reapertura de una escuela cerrada, estamos felices porque lo hacemos con todo lo mejor, porque los alumnos de esta escuela tendrán enseñanza de inglés, programación y robótica. Estas son inversiones que impactan directamente en nuestros vecinos, especialmente en los niños, fortaleciendo sus posibilidades de desarrollo a futuro”, expresó Llaryora.
Además, el intendente agradeció el acompañamiento de la comunidad educativa a las políticas de transformación del Sistema Educativo Municipal que está llevando a cabo su gestión. “Había que animarse a hacer un programa y las inversiones necesarias para encarar la educación del futuro, no podía ser que por venir a una escuela municipal los chicos estuviesen condenados a una educación del pasado”, señaló el jefe Comunal.
La escuela Dr. Antonio Sobral tendrá la modalidad de estudio de las Escuelas Alas que bajo el programa PIEnsA comenzaron a funcionar en 2021 con inglés, educación digital, programación y robótica. En una primera etapa fueron seis las escuelas que incorporan este sistema de estudio y según lo informado desde Educación del Municipio, para 2022 ese número se elevará a 34.
En este sector de la ciudad funcionará el jardín Dr. Ignacio Garzón, ya que actualmente presta servicios en un edificio muy precario y alquilado por el municipio, motivo por el cual los infantes de este establecimiento serán reubicados y se sumarán al edificio Antonio Sobral con la apertura de dos plurisalas que atiendan a niños de 45 días a 5 años que requieren matrícula.
“Esta reubicación del Jardín Maternal Dr. Ignacio Garzón permite responder a la demanda fundacional de los jardines municipales, a nuestras convicciones de carácter político social, y en otros términos, adecuar el edificio escolar para brindar un servicio educativo de calidad, de nivel inicial y primario completos”, explicó el secretario de Educación Horacio Ferreyra.
Cabe recordar que la escuela Dr. Antonio Sobral cerró en el año 2007, luego de que los alumnos que allí concurrían fueran trasladados junto a sus familias a vivir a barrio Ciudad de mis Sueños, que por entonces inauguraba la gestión del ex gobernador José Manuel de la Sota.
Esta situación devino en el cierre de la escuela Sobral. Entre los años 2008 y el presente, la comunidad barrial aledaña a la mencionada institución fue cambiando y creciendo con la presencia de dos empresas vinculadas a la cantera, los movimientos en torno al río y la costanera y la nueva instalación de familias humildes.
El edificio escolar, a lo largo de estos años, se constituyó en la sede de supervisión de escuelas, conservando su estructura general, siendo optimizado su uso como depósito de la Secretaría de Educación y de la Secretaría de Salud.
En este tiempo, muchas familias se han acercado a la escuela solicitando banco para sus hijos, ya que en el sector no hay ningún otro servicio educativo cercano.
“Son alrededor de 25 familias, con quienes nos hemos reunido y dialogado en torno a las necesidades educativas de sus hijos, familias vecinas a la escuela con niños que tienen condicionadas sus trayectorias educativas, ya que faltan regularmente a la escuela los días de lluvia, o bien no pasa el servicio de colectivo, impidiendo la asistencia regular a clases“, explicó Ferreyra.
Sobre este punto, el secretario de Políticas Sociales, Inclusión y Convivencia, Raúl La Cava recordó que la institución fue durante muchos años hogar de niños y familias del sector cuando las inclemencias climáticas provocaban anegamientos. “Por eso el orgullo de hoy de ver a muchas vecinas que hoy ya son abuelas y mamás y que esta escuela fue su hogar durante muchos años. Esta reapertura es el reconocimiento que el Municipio les brinda por tantos años de lucha”, expresó.
La reapertura también implicó el regreso de algunas docentes que formaron parte de la institución antes de su cierre. Tal es el caso María José Barragán, quien inició su carrera docente en la escuela Dr. Sobral en el año 2000 y hoy ejerce el cargo de vicedirectora. “Vuelvo feliz, porque hoy sí hay equidad e igualdad, con una escuela que cuenta con las posibilidades que en algún momento no estuvieron. Hoy, con esta oportunidad se acerca de nuevo la igualdad a toda la comunidad de Sangre y Sol”, relató la docente.