En los últimos dos años la inflación acumula 105%, mientras que viajar al extranjero es 171% más caro en pesos y, el cabotaje, 346% más oneroso.
Un informe elaborado por la Bolsa de Comercio de Córdoba muestra que el costo de los pasajes aéreos en la Argentina creció muy por encima de la inflación en los últimos dos años. El documento, que lleva la firma de Fabio Ezequiel Ventre, subdirector del Instituto de Investigaciones considera que “al margen de lo indeseable que resulta reestablecer precios mínimos para el cabotaje, las subas registradas muestran lo inoportuno que resultan en este momento, limitando la competencia y el acceso a la posibilidad de volar a través del país”.
“El Gobierno nacional reestableció las bandas tarifarias para los vuelos de cabotaje, medida que ya dio muestras de su fracaso en el pasado reciente. Esta política no solo resulta indeseable por limitar la competencia en la industria y restringir la posibilidad de que más personas con menor capacidad de pago puedan acceder al transporte aéreo, favoreciendo al monopolio estatal de Aerolíneas Argentinas, sino que además resulta inoportuno dadas las subas en los precios de los vuelos en nuestro país”, opinan en el informe.
El documento señala que, de acuerdo al INDEC, en los últimos dos años los precios al consumidor registraron una suba de 105%, golpeando fuertemente a los bolsillos de los argentinos, que cuyos ingresos se incrementaron en una mucha menor proporción. Los aumentos no fueron uniformes; el precio de los vuelos creció por encima de la inflación.
“Tomando como referencia los precios promedios consignados para las tarifas de tipo turista/promocional publicados por la plataforma TurismoCity el 1° de noviembre de 2019 y 30 de octubre último, en tan solo dos años la tarifa promedio de los viajes al extranjero aumentó 171% en pesos”, agrega.
Pone como ejemplo que “un viaje ida y vuelta en tarifa turista entre Buenos Aires y Miami, una de las rutas más populares entre los argentinos para viajar el exterior, pasó de $37 mil en promedio a un piso de $100 mil en la actualidad, una suba de 170%”.
“Si bien hubo tarifas que tuvieron aumentos mayores, como la de Buenos Aires a Río de Janeiro (que pasó de $16.500 a $48 mil como mínimo en promedio, 191% más), y otras con alzas menores, como la de Buenos Aires a Madrid (saltó de $44 mil a por lo menos $110 mil, 150% de aumento), todos los tramos internacionales aumentaron más en pesos que la inflación promedio del período”, añade.
Cabotaje
El informe indica que, para vuelos locales, los precios tuvieron un aumento muy superior: “en promedio, más del 300% en el mismo periodo. Por ejemplo, un viaje de ida y vuelta en tarifa turista entre Bariloche y Buenos Aires pasó de $2.500 a $11 mil como mínimo en promedio (una suba de 340%), mientras que uno desde Buenos Aires e Iguazú saltó de $2.100 a $9.500 (incremento de 352%), siguiendo nuevamente las tarifas publicadas por la plataforma TurismoCity”.
Para los investigadores de la Bolsa de Comercio de Córdoba, “hay distintos factores que explican las subas; por ejemplo, la caída en la oferta de vuelos por el impacto de la pandemia y un rebote superior al esperado de la demanda por turismo. Sin embargo, pese a que los factores impactan tanto en los vuelos internacionales como los de cabotaje, estos últimos tuvieron el doble de ritmo de aumento en sus precios, superando ampliamente a la inflación del periodo”.
“Este efecto diferencial se debe a que el avance regulatorio del gobierno hizo mella en el sector, magnificando los efectos perjudiciales que tuvo la pandemia del COVID-19 y perjudicando aún más a la población. Entre otras políticas del gobierno nacional, decisiones infundadas como el cierre del aeropuerto de El Palomar o el desplazamiento del rol protagónico del HUB Córdoba, que permitieron disminuir el costo y federalizar el acceso a los vuelos a lo largo de todo el país, llevaron a que nuevamente el mercado aéreo se concentre a conveniencia del gobierno”, explican.
Concluyen que “el costo de volar dentro de Argentina se disparó muy por encima en comparación a hacerlo al resto del mundo. Este también creció por encima de la inflación y en relación al poder adquisitivo del argentino promedio, haciendo que cada vez sea más difícil y costoso volar en el país“.
“En este contexto, el Gobierno decidió avanzar con el intervencionismo y reestableció los precios mínimos. Esta decisión protege a su monopolio aéreo, uno de los que tuvo mayores aumentos de precios, mientras avanza con precios máximos sobre los privados perjudicando no solo a las empresas, sino a toda la población en su conjunto“, finaliza el informe.
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