SUQUIA
Ocurrió en Santa Fe. Javier Piedrabuena había armado una buena coartada pero se delató en una entrevista radial.
Silvia Noemí Quinteros desapareció el lunes 29 de julio de 2019, en la localidad de Hersilia, provincia de Santa Fe, en medio de varias denuncias por violencia a su ex pareja, Javier Piedrabuena. La policía la buscó durante 14 días hasta que finalmente su cuerpo fue hallado sepultado en una fosa de tierra, a unos 300 metros de la ruta nacional 34. La autopsia determinó que la mujer murió asfixiada el mismo día de su desaparición.
Un mes antes, la mujer había manifestado en las redes sociales sobre el miedo que le tenía a Piedrabuena, quien además era el papá de sus hijos, y en un grito de auxilio, le pedía ayuda a la Justicia. Así mismo y con estos antecedentes, durante el tiempo que estuvo desaparecida, el marido se encargó de hacer circular la versión de que en realidad Silvia se había ido de la casa “por propia voluntad” y que mediante una llamada telefónica le había hecho saber que estaba en Córdoba. Incluso, la búsqueda quedó desarticulada luego de que “una mujer llamara a la policía manifestando ser Silvia y asegurando que estaba bien”. En el juicio, se comprobó que a esa llamada la había hecho la hermana de la víctima, bajo las amenazas de su cuñado Piedrabuena.
El paso en falso
Así las cosas, y mientras se hacía creíble la versión del marido de la desaparecida, el hombre se comunicó con una emisora radial zonal y le pidió al conductor un espacio para defenderse. El sujeto quiso dar una entrevista para “limpiar su nombre” y fue el error que lo llevó a la cárcel.
En la nota, el hombre se encargó de reforzar la teoría de un viaje voluntario de su esposa. Incluso contó que un día que había salido a comprar cigarrillos, dejó su celular en la casa y, en ese momento, entró una llamada de la mujer que fue atendida por uno de sus hijos. Dijo que estaba en Morteros, que se encontraba bien y que no quería que la busquen.
Pero, en medio de la charla, el conductor le consultó sobre cómo es Silvia como madre; a lo que Piedrabuena respondió: “ella era…”; en tiempo pasado. Esa aseveración inconsciente de que la mujer ya no estaría en en este mundo, fue lo que lo dejó al descubierto y la entrevista fue la base de la reactivación de la búsqueda de Quinteros. A los pocos días se confirmaría lo peor.
Javier Piedrabuena fue recientemente condenado a la pena de prisión perpetua.