A pesar de los múltiples reclamos por mayor seguridad vial, los siniestros son cada vez más frecuentes.
En enero de 2021, vecinos de Sierras de Oro, Las Cañitas y barrios cerrados ubicados sobre la colectora a la autopista Córdoba- Carlos Paz y sobre ruta C-45, solicitaron la intervención del Municipio de Malagueño por la cantidad de siniestros viales que se dan en ese tramo.
Un año después, la situación es exactamente la misma. A pesar del pedido por mayor iluminación en el sector, aún no hay respuesta y los accidentes se siguen suscitando.
La congestión del tránsito sobre la ruta C-45 , que conecta dicha autopista con la ciudad de Alta Gracia, se complicó desde que se inauguró el tramo que permite llegar desde esa arteria hasta Las Jarillas. Muchos cordobeses de la Capital prefieren evitar el ingreso a Carlos Paz para llegar al sur de Punilla o conectar con el Camino de las Altas Cumbres.
De este modo, los fines de semana y los días de temporada alta se producen largas colas de vehículos en el ingreso a la autopista Justiniano Allende Posse y para cruzar desde la Colectora hay que esperar largos minutos y con muchos riesgos de chocar.
“No observamos por parte de las autoridades competentes ninguna acción correctiva, ni preventiva al respecto que preserve la seguridad vial e integridad física de los ciudadanos, vecinos o usuarios, que transitamos a diario estas rutas”, habian expresado en ese entonces los vecinos en una carta enviada al Municipio de Malagueño.
Pero el accidente del pasado viernes, en donde un automovilista chocó contra un poste de alumbrado, reavivó ese viejo pedido y algunos vecinos volvieron a manifestarse en las redes sociales. “Evitemos más tragedias”, expresaron y volvieron a pedir la intervención de la intendencia de Malagueño.