SUQUIA
La posibilidad de que su hijo nacido en cautiverio podía estar en la ciudad de Alta Gracia tuvo en vilo a todo un país.
María de los Ángeles “Marita Veron” fue secuestrada en el año 2002 en la Provincia de Tucumán a la edad de 23 años. Desde entonces, su madre, Susana Trimarco, encabeza una búsqueda incesante que la llevó a descubrir una gran red de trata de personas a lo largo del país pero que jamás la llevó a dar con el paradero de su hija.
Doce años después, una pista la traía a Córdoba
En el año 2014, un dato arrojado por la misma Trimarco mantuvo en vilo a todo un país. El hijo de la desaparecida (nacido en cautiverio) podía estar viviendo en Córdoba, más precisamente en la tranquila Comuna de Villa del Prado, ubicada a unos 5 kilómetros de la ciudad de Alta Gracia.
La mujer movió cielo y tierra para dar con el paradero de su supuesto nieto. Fue una joven que aparentemente había estado secuestrada con Marita quien le aseguró a Trimarco haber visto embarazada a su hija. Cabe recordar que para el momento de su desaparición, Marita tenía una niña de tres años.
A partir de allí, fuertes indicios la trajeron a Córdoba, aunque todo fue en vano.
Según Trimarco, el adolescente en cuestión era fruto de los abusos que Marita había sufrido por parte del “Chenga” Gomez, uno de sus raptores. Cuando la Justicia desbarató el prostíbulo que éste, su hermano y su madre dirigían en la Provincia de La Rioja, Paola Ceballos, su pareja en aquel entonces, huyó hacia Córdoba y jamás fue investigada. Lo peculiar es que lo había hecho con un niño, a pesar de que nadie la había visto embarazada.
La hipótesis de la madre de Veron era que ese niño erq0 su nieto y exigió exámenes de ADN. Los medios del país se enfocaron en la sospechosa mujer de Villa del Prado quien desde el inicio desmintió los dichos de Trimarco y hasta la denunció por calumnias y daño moral.
Los resultados de compatibilidad genética le darían la razón. El joven no era hijo de Marita, pero tampoco lo era de Ceballos y fue allí que ésta reconoció que la madre biológica era una mujer que había trabajado en el prostíbulo de los Gómez y que se “lo había entregado” porque ella no podía cuidarlo.
Un trágico final
Sin saber en realidad si Marita alguna vez dio a luz, en enero del 2019 y a la edad de 20 años, ese adolescente que había estado en la mira de todos tomó una drástica decisión y se quitó la vida. La localidad se vio consternada por la noticia.