Se cumplen hoy cuatro años de uno de los femicidios mas atroces que guarda la ciudad de Alta Gracia.
El 19 de mayo del año 2018, Alta Gracia se vería sacudida por el brutal y misterioso crimen de una reconocida odontóloga de esa ciudad: Silvia Maddalena.
La mujer de 37 años fue hallada sin vida dentro de su consultorio y fue su padre quien se encontró con la triste escena. Al ver que su hija no respondía su teléfono celular, el hombre se acercó al centro odontológico de Av del Libertador y allí se dio con el horror. El cuerpo de la mujer presentaba signos de estrangulamiento – entre otras marcas- y de haber sido abusada sexualmente; algo que a posterior, se confirmó.
A partir de allí, el misterio. Los días pasaban y no había rastros ni pistas que los llevara al autor del hecho. Una semana después y gracias a que una vecina descubrió elementos que involucraban a su pareja en el crimen, la verdad salió a la luz. Fue cuando Héctor Gómez, un rosarino de 23 años, era detenido e imputado de femicidio; su hermano Alcides también cayó por encubrimiento.
Esto, sin duda, fue una verdadera sorpresa para el fiscal Alejandro Peralta Ottonello. Gómez no estaba ni cerca de la lista de sospechosos y de ninguna manera podrían haberlo vinculado con en el hecho, de no haber sido porque la mujer y madre de su hija se animó a denunciarlo. Días después los hisopados no dejarían dudas, confirmando que el ADN del detenido era compatible con el hallado en el cuerpo de la víctima.
Poco se supo acerca del móvil del crimen y nunca se conoció con exactitud si la mujer conocía o no a su victimario. Algunos testigos, declararon haber visto a Gómez en varias oportunidades merodeando por el consultorio. Incluso, se dijo además que la odontóloga lo había tenido agendado en alguna oportunidad como un paciente a atender, pero al parecer, Gómez nunca asistió a esa consulta.
En el año 2019 el femicida de Silvia fue condenado a prisión perpetua en un juicio abreviado. Instancia que prefirió evitar el padre de la víctima y a la que sólo asistió su madre por algunos minutos.
La imputación había sido también tema de debate ya que para algunos letrados el hecho no podía ser juzgado bajo la figura de femicidio, al no poder hallar vinculo entre el autor y la víctima, algo clave- al menos en su momento- para las condenas de género. Sin embargo, la vulnerabilidad de la víctima y el hecho de que Gómez haya actuado con supremacía sobre ella, la posicionaba en una indefensión propia de su condición de mujer y, tras esto, la Justicia no dudó y aplicó esa carátula.
Silvia se convirtió en la 5ta víctima de este tipo en Alta Gracia y fue, sin duda, uno de los crímenes mas aberrantes que movilizó incluso a nivel nacional.