La Municipalidad de Córdoba avanza en la refacción de los baños y cielorrasos del Hospital Infantil, obras necesarias ante la endeble situación de infraestructura y sanitaria en la que se encontraba la institución municipal. Son intervenidos los 32 baños que posee el Hospital, 17 de ellos demolidos en su totalidad para su confección desde cero, debido a la falta de mantenimiento que sufrió durante años que ocasionó rotura de equipamiento y pisos, humedad en paredes, falta de grifería, precaria instalación cloacal, pérdida continua de líquidos en inodoros y deterioro de revestimientos y mármoles.
La obra contempla el reemplazo de las conexiones de agua y cloaca, equipamiento de sanitarios, repondrán griferías faltantes y espejos; se colocarán nuevos pisos, revestimientos, duchas y puertas y se desobstruirán ventilaciones tapadas.
Además, se reemplaza el antiguo cielorraso de tablillas que representa un foco infeccioso por su engorrosa higienización y la falta de su estructura en numerosos sectores. En cambio, se instalarán nuevos desmontables, facilitando la tarea de limpieza.
En los sectores faltantes, se cambiará la iluminación original por LED, ya que el Hospital presentaba sectores de acceso público, laboratorios, pasillos y zonas quirúrgicas totalmente a oscuras. La intervención irá acompañada de una nueva instalación eléctrica.
Finalmente, se pintará la totalidad de la fachada y el hall de ingreso del edificio.
Las obras de estricta necesidad se realizan por etapas, lo que requiere el traslado de pacientes a las restantes salas no intervenidas, las cuales fueron adecuadas para el correcto tratamiento y cuidado.
“La mayoría de los niños que ingresan al Infantil presentan patologías respiratorias, especialmente en invierno. Por eso se tomó la decisión de realizar las obras en época estival, algo que durante los últimos años no se pudo concretar por la pandemia”, expresó el director del Hospital Infantil, Daniel Marín.
“Hoy presentamos un 80 por ciento de ocupación, por lo que se readecuaron las salas para continuar con la operatividad del Hospital y la atención de pacientes y poder iniciar los trabajos de refacción”, añadió. Las tareas se desarrollan mediante burbujas físicas que contienen el polvo a los fines de evitar contaminaciones en otros sectores.
Previamente, la Municipalidad cambió aberturas del ingreso y adecuó su ingreso para personas con discapacidad y resolvió problemas filtraciones de cubiertas en la lucera del hall de entrada y la consecuente inundación en el subsuelo.