La nueva pareja del espectáculo se llevó una sorpresa al finalizar el encuentro romántico.
Eugenia “La China” Suárez y Thomas Nicolás Tobar, el rapero conocido como Rusherking, venían dando indicios de estar comenzando una relación. El lunes por la madrugada, post Martín Fierro, se los vio a los besos en un after party de la entrega de premios, confirmando los rumores que habían empezado a circular de un romance entre ellos.
A los pocos días, trascendió un almuerzo en la casa de ella con un menú muy particular: milanesas con salsa de tomate. El fin de semana, la cosa siguió en los festejos de cumpleaños de él en un bar, y si bien se guardaron de mostrarse juntos, las respectivas publicaciones en las redes sociales dieron por sentado que habían estado en el mismo lugar. Solo faltaban las primeras imágenes juntos en la vía pública, y llagaron este martes, en la pantalla de LAM.
En el programa que conduce Ángel de Brito en América, montaron guardia en un hotel de la zona de Recoleta en el que se suponía que la actriz y el cantante estaban pasando la noche juntos. Durante un buen tiempo no hubo imágenes de los novios, que disfrutaban su intimidad puertas adentro del establecimiento. Pero afuera también pasaban cosas interesantes, y cuando apenas habían pasado las 8 de la mañana, las cámaras captaron cómo la grúa se llevaba el vehículo del trapero. Previamente, había hecho lo propio con la camioneta de la ex Casi ángeles.
Según el testimonio del cronista, que pasó la noche en el lugar, ambos cenaron en un restaurante y luego se dirigieron al hotel, del que recién salieron pasado el mediodía. Primero se vio a al actriz, vestida casi íntegramente de negro, con gorra y lentes oscuros, fumando un cigarrillo. Al rato apareció el trapero, con un conjunto deportivo azul y gorra blanca y enfilaron hacia la esquina para llevarse una sorpresa.
Como habían adelantado las imágenes, ni la camioneta de ella ni el auto de él estaban estacionados donde los habían dejado. Cuando llegaron al lugar, miraron en ambos sentidos como buscando una explicación y en cambio se encontraron con las cámaras y la presencia del cronista, que les informó lo sucedido y comenzó a preguntarles por su relación.
Sin emitir opiniones al respecto y apenas con unos saludos de cortesía, la actriz y el cantante cruzaron la avenida y se dispusieron a parar un taxi. Luego de un par intentos en vano, el trapero logró encontrar una unidad libre y se abalanzó sobre el vehículo. Subió él primero y atrás lo hizo la China, que se despidió del cronista con un “buen día” y le advirtió que iba a cerrar la puerta, en las únicas palabras que captó el micrófono.