Luego de estar más de ocho horas retenido en el Aeropuerto Internacional Tullamarine de Melbourne, Novak Djokovic no recibió el permiso por parte de las autoridades australianas para poder ingresar al país para disputar el Abierto de Australia y deberá volver a Serbia en el próximo vuelo, según adelantó el sitio australiano The Age.
“La Fuerza Fronteriza de Australia (ABF, por sus siglas en inglés) continuará asegurándose de que quienes lleguen a nuestra frontera cumplan con nuestras leyes y requisitos de entrada. La ABF puede confirmar que el Sr. Djokovic no proporcionó las pruebas adecuadas para cumplir con los requisitos de entrada a Australia y, posteriormente, se canceló su visa. Los no ciudadanos que no tengan una visa válida a la entrada o que hayan cancelado su visa serán detenidos y expulsados de Australia”, señala el comunicado emitido por el organismo.
Por su parte, el Ministro de Salud, Greg Hunt, informó en diálogo con Canal 7 que el número 1 del ranking ATP“falló en proveer la evidencia necesaria para los requisitos de entrada a Australia”, en concordancia con el escrito publicado por la ABF. “Francamente, hemos sido muy fuertes, claros y absolutos, hay una regla para todos”, sostuvo.
También se refirió al asunto el primer ministro australiano, Scott Morrison, mediante un comunicado en su cuenta de Twitter: “Las reglas son reglas, especialmente cuando se trata de nuestras fronteras. Nadie está por encima de estas reglas. Nuestras sólidas políticas fronterizas han sido fundamentales para que Australia tenga una de las tasas de mortalidad más bajas del mundo por COVID, seguimos estando atentos”.