Superó un tratamiento de quimioterapia y adornó todo su móvil con motivos navideños y globos.
Informe de Alejandro Pozo.
La famosa colectivera Pocha logró superar su tratamiento de quimioterapia y pudo cumplir un año más con su ritual de disfrazarse de “Papa Noel” y entregar regalos a los niños que suben a su unidad del transporte público de pasajeros de la Ciudad de Córdoba.
“Este año soy Mamá Noel porque volví a nacer”, dice Pocha antes de subirse a dar una vuelta completa en el 601 de Ersa, colectivo que adornó con guirnaldas, globos y adornos navideños.
Pocha regreso a su trabajo en noviembre, tras un extenso tratamiento de quimioterapia que la libró del cáncer que le habían diagnosticado el año pasado, cuando en Navidad cumplió con su ritual solidario y luego anunció su dolencia.