Ordenaron liberar a Ricardo Jaime, el último de los exfuncionarios kirchneristas preso por corrupción

Lo decidió el Tribunal Oral Federal 7, a cargo del juicio por el Caso Cuadernos, en el cual el exsecretario de Transporte tenía prisión preventiva.

El Tribunal Oral Federal 7 decidió liberar a Ricardo Jaime, el exsecretario de Transporte del kirchnerismo que estaba detenido con prisión preventiva por ser uno de los imputados en el Caso Cuadernos. El ex funcionario estaba detenido por otras causas desde abril de 2016 y tiene varias condenas por corrupción en su prontuario. Condenados por corrupción hay varios ex funcionarios kirchneristas, el único detenido es Jaime. Pero lo estará solo por unos días más.

Los jueces Germán Castelli, Fernando Canero y Enrique Méndez Signori determinaron que la prisión preventiva de Jaime debe cesar el próximo 18 de marzo luego de que se renovara en varias ocasiones. Los jueces aseguraron que el estado de salud de Jaime cambió la situación respecto de su detención.

El juez Méndez Signori hizo referencia a informes médicos sumados a expediente y estableció que: “Corroborándose de las circunstancias expuestas, la existencia de un delicado cuadro de salud por parte de Jaime que amerita la morigeración de las medidas de cautela, ya que resulta claro que, más allá de las patologías crónicas que padece el nombrado, con el transcurso del tiempo se ha venido presentando una situación de deterioro de su salud y estado clínico general”. Jaime está detenido en la cárcel de Ezeiza que depende del Servicio Penitenciario Federal (SPF).

Según se desprende de la resolución el 13 de marzo pasado, el SPF había enviado un informe en el que señaló que Jaime presentaba hipertensión arterial esencial, que es extabaquista, padece de hipotiroidismo subclínico, hiperglucemias, un nódulo benigno en el pulmón, un carcinoma basocelular lobulado y una depresión reactiva. Además, detallaron las características de dichos padecimientos y los tratamientos correspondientes.

Al voto de Méndez Signori se sumó el de Castelli. En tanto el juez Canero, señalo que “surge ostensiblemente acreditado el agravamiento del estado de salud de Jaime” pero que el ex funcionario debía seguir detenido con prisión domiciliaria. La decisión de no prorrogar la prisión preventiva fue votada por los tres jueces, pero uno de ellos votó por la prisión domiciliaria. La mayoría determinó que Jaime en breve puede andar por la calle.

A partir del 18 de marzo, cuando se haga efectiva la libertad de Jaime, los jueces impusieron las siguientes condiciones:

  • La promesa del imputado de someterse al procedimiento y de no obstaculizar la investigación.
  • La obligación de notificar a esta sede cualquier cambio de domicilio, como así también toda circunstancia en virtud de la cual deba ausentarse del mismo por más de 48 horas o más de 70 km.
  • La prohibición de salir del país sin autorización previa.
  • La entrega del pasaporte que tuviere en su poder a través de la defensa –en caso de contar con dicho documento- e interdicción de expedir nuevos a su nombre.
  • La colocación de un dispositivo de monitoreo de GPS –Programa de Asistencia de Personas Bajo Vigilancia Electrónica”.

La fiscal del Caso Cuadernos, Fabiana León, había dictaminado de acuerdo a lo que decía la defensa de Jaime sobre el estado de salud del ex funcionario: ”No pueden ser desatendidos elementales razones humanitarias que inspiran el instituto y que, en aras de salvaguardar el inalienable derecho a la vida y la salud, habilitan la necesidad de ponderar -previo informes pertinentes- la concesión de una medida de morigeración; la que, con todo, siempre fue tenida en subsidiaria consideración por esta Fiscal General”. La fiscal había propuesto que Jaime continuara detenido con prisión preventiva. León aprovechó la ocasión de dictaminar sobre la prisión preventiva de Jaime para criticar al TOF 7 por las demoras para iniciar el juicio por el Caso Cuadernos.

Jaime fue condenado en seis ocasiones por casos de corrupción. La primera condena fue en 2013 por intentar robar pruebas en un allanamiento. La segunda fue en 2015 cuando se declaró culpable y acordó una pena por haber cobrado coimas de parte de las empresas TBA, que explotaba colectivos y trenes, y TEBA, que tiene la concesión de la Terminal de Ómnibus de Retiro. Las dos empresas estaban bajo la órbita de control de la secretaría de Transporte de la Nación que encabezó Jaime, a pedido de su amigo Néstor Kirchner, sin tener ningún conocimiento en la materia. Esas dos primeras condenas están firmes.

Fue condenado por su responsabilidad en la Tragedia de Once: ese fallo está pendiente de revisión por la Corte Suprema de Justicia de la Nación y la Casación le impuso una pena de seis años de prisión. En abril de 2022 recibió dos condenas en un mismo juicio: por haberse enriquecido ilícitamente -a través de suculentas coimas- y otra por haber cometido administración fraudulenta contra el Estado y cobrado coimas. Esta segunda condena se relaciona con la millonaria compra de trenes chatarra a España y Portugal. Por el delito de administración fraudulenta en ese juicio fue condenado junto a Julio De Vido, quien fuera ministro de Planificación durante el kirchnerismo

La última condena dictada contra Jaime fue en septiembre de 2022 porque había pactado una coima con la empresa Alstom si se llevaba adelante el proyecto prometido y nunca realizado del Tren Bala que iba a unir Buenos Aires con Rosario y Córdoba. Todavía no se han compuesto todas las penas que Jaime tiene en su haber, por lo que no se sabe a cuánto será condenado definitivamente.

Pero, además de las condenas, el ex secretario de Transporte, que estuvo en el cargo entre 2003 y 2009, tiene abiertos otros casos de corrupción. Uno de ellos es por la sospecha de pago de coimas en el contrato del soterramiento del Ferrocarril Sarmiento, que se inició en su gestión, y la empresa Odebrecht repartía sobornos por todo el continente.

Fue amo y señor del sector de Transporte durante los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner durante 2226 días. Cuando el próximo 18 de marzo cese la prisión preventiva, Jaime habrá pasado 2541 días detenido. Fue el primer ex funcionario kirchnerista preso por casos de corrupción y el último en salir de la cárcel.