SUQUIA
En los meses venideros, la Municipalidad de Córdoba dará inicio a las obras de reacondicionamiento y puesta en valor del Centro Cultural General Paz.
Debido al alto deterioro por filtraciones en las cubiertas y patologías propias a causa de la antigüedad de la edificación y obras inconclusas que dejaron sin protección la cubierta histórica, los techos serán el principal foco a intervenir en todo el sector.
El Centro Cultural General Paz está conformado por un SUM que data de inicios del siglo XX, ubicado en la esquina de Juan P. Pringles y Catamarca; y una construcción en “ele” que la rodea, erigida en 1982 por el arquitecto Miguel Ángel Roca. Ambos sectores presentan problemas estructurales de cubiertas.
En el SUM se recuperará la estructura existente de madera, se le añadirán aislaciones hídricas y térmicas y se reacondicionarán instalaciones pluviales.
Este sector se monta sobre un subsuelo de losa de hormigón armado macizo, el cual presenta un alto grado de humedad por las filtraciones del techo. Las obras contemplan el reforzado de la estructura de entre piso con verificación de fundaciones.
Por otra parte, el ala administrativa en “ele” se removerá y ejecutará una cubierta nueva, se recambiarán embudos y conductos pluviales, repararán las instalaciones en baños con recambio de artefactos y griferías, así como también cielorrasos y revoques.
El proyecto propone la conservación de todos los elementos significativos del Centro, de manera que sea mantenida la memoria del edificio y se adecúe a las condiciones determinantes para el desarrollo de sus actividades.
Una estructura con más de cien años de historia
El Centro Cultural General Paz integra el catálogo de Bienes Inmuebles y Lugares de Patrimonio de la Ciudad de Córdoba. En las obras de puesta en valor participará personal idóneo en materia de patrimonio, y estará supervisado por la Comisión Nacional de Monumentos, De Lugares y De Bienes Históricos de la Nación.
En el lugar funcionaba un mercado de abasto, construido en 1917.
La estructura de hierro y las rejas perimetrales datan de dicha época y fueron importadas desde Inglaterra. Hoy aún se pueden visualizar los pararrayos sobre el techo y dos escudos de Córdoba con el diseño de principios del siglo XX.
En cada vértice se erigen edificaciones que funcionaban como administraciones y baños. Estos espacios también serán refuncionalizados.
Nueve años después suman cámaras frigoríficas en el subsuelo, junto al depósito.
En la década del 70 deja de funcionar como mercado y en los 80 se toma la decisión de readecuarlo como centro cultural. El ingeniero Miguel Ángel Roca diseña y ejecuta una estructura en “ele” que abraza a la antigua edificación en 1982.
Empleados municipales recuerdan un último recital de la Bersuit Vergarabat hace más de 10 años. Las filtraciones por lluvias ya habían deteriorado el techo y el subsuelo y se precisaban trabajos de reparación para dar continuidad a las actividades artísticas.
Desde entonces las promesas por su puesta en valor y reapertura fueron múltiples: desde una co-gestión con el Instituto Nacional de Teatro hasta licitaciones fallidas por parte del Estado local.
Durante gran parte del 2021 y 2022 funcionó como centro de testeo covid-19.
Actualmente, sobre la edificación construida en 1982 se llevan adelante talleres de canto, danza, tango, pintura, mozaiquismo y robótica.
