Dos fiestas clandestinas fueron desarticuladas durante la madrugada en la ciudad de Córdoba. En ambos lugares había más de 700 estudiantes reunidos sin habilitación y con consumo de alcohol entre menores, según confirmaron las autoridades.
Los operativos se realizaron en un salón de eventos y en un predio donde, además de la falta de permisos, se detectaron fallas graves de seguridad. Había salidas bloqueadas, instalaciones precarias y cableado expuesto, lo que obligó a suspender todo de inmediato.
La Municipalidad y la Policía clausuraron los espacios y notificaron a los organizadores. Se analizan sanciones y nuevas inspecciones para evitar que se repitan reuniones masivas sin control dirigidas a adolescentes.



